Atentado letal en un minibús de Bagdad

Al menos 22 personas murieron hoy y 50 resultaron heridas tras la detonación de un minibús cargado de explosivos en un céntrico barrio de Bagdad, informó el canal de televisión Al Arabiya. Secuestran a cuatro alemanes

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Según la cadena Al Arabiya, que cita fuentes gubernamentales, el atentado tuvo lugar en la plaza Tayaran (plaza de la Aviación), en un momento en el que había allí un gran número de personas.

El Ministerio del Interior dijo que el vehículo se encontraba estacionado en medio de la plaza, donde se reúnen los obreros para ofrecerse como mano de obra a los contratistas.

Algunos de los heridos se encuentran en situación crítica, por lo que se cree que el número de fallecidos puede ir en aumento según pasen las horas.

Este atentado llega apenas 24 horas después de que los embajadores de EEUU e Irán mantuviesen una histórica reunión en la oficina del primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, para tratar de atajar la violencia que azota el país.

Mientras esa reunión tenía lugar, un coche bomba dejó 24 muertos y 68 heridos en la plaza Al Jilani, en el centro de Bagdad, a la entrada de un mercado popular.

La explosión de ayer causó además enormes daños materiales en la mezquita El Jeque Abdulqader Al Kailani, una de las más frecuentadas por los árabes suníes de Irak.

Insurgentes secuestran a cuatro técnicos informáticos alemanes
Cuatro técnicos informáticos alemanes fueron raptados hoy en la céntrica calle Palestina en Bagdad por un grupo de insurgentes camuflados de miembros de las fuerzas de elite del Ministerio del Interior iraquí.

Según las fuentes, los insurgentes instalaron un puesto de control falso e interceptaron un convoy de todoterrenos donde viajaban los expertos.

El secuestro tuvo lugar después de que los alemanes abandonasen una de las oficinas del Ministerio de Finanzas, donde trabajan como adiestradores de los funcionarios iraquíes, agregaron las fuentes.

Las fuentes no especificaron el destino de los guardaespaldas que acompañaban a los expertos. En febrero pasado, dos ciudadanos de origen alemán fueron secuestrados en Irak por un grupo de insurgentes que pedía la retirada de las tropas alemanas de Afganistán.

El grupo que supuestamente los mantiene todavía secuestrados dio en abril un nuevo plazo de diez días para que Alemania comenzase la retirada de sus tropas de Afganistán, de lo contrario asesinaría a los dos rehenes, según un vídeo difundido en internet.

En las imágenes colgadas en la red aparecieron Hannelore Krause, de 61 años, y su hijo Sinan, de 20.

En ellas, Krause instaba a Alemania y Austria a cumplir con las exigencias de los captores, pedía ayuda al pueblo alemán e imploraba a su familia para que hagan todo lo posible para evitar su muerte.