Marcela Tauro: “Con mi hijo estuvimos al borde de la muerte”

Conforma con Marcelo Polino el binomio de periodistas de espectáculos con mayor trayectoria de la actualidad. Su sello indiscutido, su personalidad y su carácter la hacen una referente del género. Polémica y sagaz, brilla desde hace años en Intrusos junto a Jorge Rial, y acompaña a Santiago del Moro y a Guido Kazcka en La 100. Hoy, Marcela Tauro responde las 12 preguntas de Teleshow.

1. —¿Cuál es el recuerdo más feliz de tu infancia?

—Toda mi infancia fue feliz, sobre todo porque tenía a mamá y a papá, a toda la familia unida. Tenía a mis primos, con quienes jugaba. Recuerdo con cariño momentos como la Comunión. Hoy, sobre todo extraño a mi papá: me bañaba cuando era chiquita, lo esperaba para comer. Tuve una infancia súper feliz con mis abuelos. Ahora que me preguntan esto, siento cuánto lo extraño a mi papá.

2. —¿Cuándo decidiste ser periodista? ¿Y cúal fue tu primer trabajo en el medio?

—Lo del periodismo lo heredé un poco de mi mamá, Carmen. Compraba la revista Gente desde el primer día, y la vida y mi vocación me llevó a trabajar ahí. Estudié dos años Derecho y dejé. Después empecé la carrera de Periodismo en la UCA, y ahí me tocó una beca en El Gráfico, más tarde entré en Gente: ahí me formaron, es mi primer gran trabajo en el medio.

3. —¿ Cuál fue el momento más difícil de tu vida?

—El nacimiento de mi hijo: estuvimos al borde de la muerte los dos. Fue un momento muy doloroso. No sé de dónde saqué fuerzas, pero fue sin dudas el momento que más me marcó. También la muerte de mi papá, porque sentí que me pasaban las cosas, que yo no era una super heroína. En los dos hechos sentí eso: me pasa lo que a todo el mundo. Pero eso me hizo más fuerte.

4. —¿Qué recuerdo te dejó tu paso por el Bailando?

—Estuvo bien, pero no lo pude disfrutar mucho porque pensé que iba a poder manejarlo mejor: la verdad fue que me obsesioné con el tema del baile. Como yo no sabía bailar no supe disfrutar del baile ni de hacer una previa. Me peleaba mucho pero me gustó hacerlo. La síntesis es que no lo supe disfrutar.

5. —¿Te gustaría tener tu propio programa? ¿De qué sería?

—De espiritualidad, de viajes o algo dedicado a la mujer. Pero principalmente me gustaría algo espiritual, como lo que hacía Víctor Sueiro en su momento, de vírgenes. Me encantaría. Y es algo que en algún momento haré.

6. —Si tuvieras que elegir una sola: ¿Mirtha Legrand o Susana Giménez?

—Hummmm, ¡qué difícil! Me gusta cómo pregunta Mirtha, y de Susana, la frescura: me gustaría estar sonriente las 24 horas, y que todo me chupe un huevo como a Susana (ríe). "Ay, mi amor”, me encanta eso. Vive en su mundo, me encanta Susana.

7. —¿Quiénes son los mejores panelistas de la televisión?

—Muchos: Marina Calabro, Yanina Latorre, Karina Iavícoli; me gustan muchas... No quiero ser injusta. Costa, en el programa de Vero Lozano; Evelyn (von Brocke), las chicas de Bendita. Y de hombres, (Adrián) Pallares me gusta, (Damián) Rojo, que se votaría a él mismo, je. (Daniel) Ambrosino, Daniel Rinaldi. Y de la camada nueva, Lío Pecoraro, Luis Piñeyro, Guido Zaffora. Los de la camada nueva vienen bien moldeados.

8. —¿Qué es lo que menos te bancás de los famosos?

—Que cuando llegan, a veces se la creen un poquito y se olvidan de sus inicios, y no te saludan o no te dan notas. Cuando no paran para dar una nota y salen corriendo me molesta muchísimo. Esa actitud no la tienen ni Susana, ni Mirtha, ellas son muy educadas. En general, los famosos no son muy amables.

9. —¿Estuviste enamorada de algún famoso?

—No, nunca.

10. —¿En qué juega a favor y en qué en contra salir con alguien más joven?

—Todo es a favor. En realidad, al principio me paranoiqueaba mucho con la diferencia de edad con mi novio (Martín Bisio, 22 años menor). Mucho mucho... Incluso el año pasado tuvimos una crisis por eso. La gente más joven es más libre, no tiene mambos, los que tenemos toda la gente grande. Vienen con un chip de estar “sin problemas”; al contrario, te solucionan todo, te tratan mejor, te cuidan, te miman, te protegen, son leales. Por ahí, en contra, que la gente te critica más, o piensan que vos lo mantenés, esas boludeces. Pero la verdad que yo veo todo a favor.

11. —Lucho Avilés y Jorge Rial: lo mejor y lo peor de cada uno.

—Lucho te enseñaba un montón, Jorge también: aprendí de los dos. Pero lo peor es el carácter (ríe). Lo mejor que tiene Jorge es que me deja decir lo que pienso. Conmigo es leal, y Lucho también lo fue. Y yo lo fui con ellos. A los dos les he dicho barbaridades, por eso Lucho me suspendió, pero creo que después me terminó agradeciendo. Y a Jorge le digo barbaridades y me las deja decirlas, me deja decir lo que pienso. Realmente, se lo super agradezco, es un buen compañero de laburo. Lo mejor que tenía Lucho es que pagaba muy bien y, además, te llevaba a comer. Jorge no paga porque no contrata él, pero nos invita a la casa a comer. Y sé que si tengo un problema o necesito algo, puedo recurrir a él: Jorge ayuda a mucha gente. Tiene un carácter bravo, como yo, pero sé de su costado solidario.

12. —Del 1 al 10, ¿qué tan sexual sos?

—Creo que soy un 10 (risas). Ahora, con la serotonina... pero poneme 9,50 (risas).

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