La China Suárez en las playas de Punta del Este recibió una sorpresa muy especial

Llegaron a las playas Uruguay los tres hijos de la actriz y cantante y comenzaron los paseos en familia

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(Instagram)

Después de disfrutar unos días en pareja y con amigos en Uruguay, Eugenia se juntó con sus hijos Rufina, fruto de su exrelación con Nicolás Cabré; también con Magnolia y Amancio, los pequeños que tuvo con Benjamín Vicuña. La acompaña en estas horas una de sus mejores amigas, la empresaria de moda Natalia Antolín, marca donde la China tiene su propia cápsula con diferentes diseños de ropa. Con Natalia se conocen hace muchos años y lograron forjar una amistad más allá de los negocios que las unen.

Crédito: @sangrejaponesa

Algunos amigos de la actriz fueron testigos de los comentarios que hacía con respecto a sus hijos: “Los extraño mucho, no veo la hora de verlos”, repetía la China. Tanto Nicolás Cabré como Benjamín Vicuña han sostenido que Eugenia Suárez es una gran mamá muy dedicada a los niños; siempre le gusta organizar los cumpleaños, festejos y entretenerlos con juegos divertidos y creativos. De todos modos, aprovechó el tiempo todas las jornadas de sol para disfrutar su estadía en Punta del Este, para relacionarse y divertirse; disfrutó de su reciente vínculo con el cantante Lauty Gram, con quien compartió caminatas, almuerzos frente al mar.

Lauty Gram y La China Suárez compartieron un día de playa en Punta del Este

Otra de las mujeres presentes en la vida de la China es su mamá, quien la ayuda y asiste como una excelente abuela. Se llama Marcela Riveiro y mantiene un perfil bajo, pero, a pesar de eso, tiene su propia cuenta de Instagram. Siempre que pueden, están juntas compartiendo horas de tomar mate, cocinar, charlar de sus vidas y a eso se le suman juegos compartidos con los chicos. Las dos se divierten mucho y siempre conversan sobre sus abuelos paternos y maternos; siempre terminan con la anécdota de que de chica le decían “ponja”. María Eugenia Suárez nació el 9 de marzo de 1992, tiene ascendencia española y japonesa. Sus abuelos paternos eran de Galicia y Cataluña, y por otro lado, su mamá tiene herencia japonesa. Su abuela materna, Marta Mitsumori, nació en Argentina, pero era hija de inmigrantes japoneses. Es para ella y para todos la China Suárez; ponerse “japonesa” le resultaba muy largo, pero en su Instagram sí figura @sangrejaponesa, para no tener ya ningún tipo de problema con algún llamado de atención que le hicieron los propios diplomáticos japoneses que están al frente de la Embajada en Argentina.

Mientras disfruta de sus niños, también tiene una reflexión acerca de algunas críticas que recibe en sus redes, desde cómo se viste hasta cuándo levantan el dedo por lo que hace o no, y sobre todo cuando se meten en su vida privada y critican con quién está en pareja o con quien no. Siempre ha sido juzgada por sus temas personales en las redes que maneja.

Y en otros momentos, se encuentra más relajada y mucho más reflexiva, y puede apelar a alguna frase que le comparten sus mismos seguidores o que puede extraer de algunas cuentas de Instagram que publican definiciones con otro punto de vista y así responder a aquellos que la juzgan con un mensaje para algunos más enriquecedor. Este año para Eugenia vienen muchos proyectos de trabajo.

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