Jorge Alberto Gueglio, un hombre de 75 años, fue asesinado de siete puñaladas en su departamento del microcentro de Rosario. El cuerpo de Gueglio fue encontrado por su hija, quien acudió al domicilio porque su padre no respondía a sus llamados por teléfono. Tenía un hematoma en el cráneo y heridas de arma blanca en el rostro, tórax y espalda. Se presume que la agresora fue una mujer que ingresó al edificio con la víctima, una posible viuda negra, según las imágenes de las cámaras de videovigilancia de la zona.
El caso es investigado por la fiscal María de los Ángeles Granato, quien ordenó que el cadáver sea trasladado al Instituto Médico Legal de Rosario para la realización de la autopsia. También, para establecer la fecha de muerte, ya que se supone que el crimen ocurrió en la noche del martes.
La hija de Gueglio entró al departamento con un juego de llaves que tenía, ya que su padre tampoco respondía al timbre y a los golpes a la puerta. Al dirigirse a la habitación lo vio ya muerto en la cama, boca abajo, con múltiples heridas.
Los agentes que trabajaron en la escena también notaron manchas de sangre en el piso, en la pared del baño, en una toalla y restos de lápiz labial en un papel.
En el interior de la propiedad faltaba el teléfono de la víctima, la billetera, la llave del inmueble y del auto, un Toyota Corolla que fue hallado estacionado en una cochera lindera a la torre donde ocurrió el homicidio.
En los pasillos internos del edificio se detectaron cámaras de videovigilancia, como así también en locales vecinos. A su vez, es una zona donde hay domos públicos, por lo que los investigadores analizarán todos los dispositivos para tratar de avanzar con la identificación de la sospechosa.
Los vecinos entrevistados por medios locales dijeron no haber escuchado ruidos ni gritos. “Nos enteramos por el grupo de WhatsApp. No sé en qué horario fue, pero nosotros no tenemos más la seguridad a la noche. Antes teníamos de 22 a 6. Nosotros pensábamos que había sido una muerte natural. Recién me entero de lo que verdaderamente pasó”, comentó a Radio 2 una mujer que vive en el lugar.
Gueglio era jugador de bridge, según los posteos que realizaba en su cuenta de Facebook. La Asociación de Bridge Argentino lo despidió este miércoles a través de una publicación con su foto, que se llenó de comentarios de personas que lo recordaban como “una gran persona”.
Con este homicidio, en la jurisdicción de Rosario se acumulan cinco asesinatos en seis días. El primero de esta seguidilla tuvo lugar el viernes de la semana pasada, cuando Matías Zamora fue acribillado a tiros con dos pistolas en Lima al 2000. El domingo ocurrió el doble crimen de Lautaro Román Escobar y Javier Leandro Ramírez, quienes fueron atacados en Vuelta de Obligado al 4900 por dos agresores que luego se echaron a correr.
El pasado martes, sicarios en moto asesinaron a Julio César Reybet en la puerta de un lavadero de Cafferata al 2900, en la zona oeste. En la balacera también resultaron heridas otras tres personas que estaban junto con la víctima, de las cuales dos actualmente permanecen internadas.