La campaña agrícola 2025–2026 enfrenta un panorama desafiante en el sur del Perú. El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi) advirtió que la escasez de lluvias y la presencia de heladas y granizadas están incidiendo directamente en el desarrollo de los cultivos y la ganadería en las regiones de Puno, Cusco y Apurímac.
La falta de precipitaciones desde finales de octubre afecta de manera notoria a las principales zonas productoras, retrasando labores esenciales del ciclo agrícola.
En Puno, localidades como Ayaviri, Juli, Ilave, Capachica, Putina y Desaguadero reportan que los cultivos de papa, quinua y haba presentan estados de desarrollo entre regular y malo.
El retraso en las lluvias ha impedido la siembra y el crecimiento normal de las plantas, mientras que la ocurrencia de granizadas y heladas ha provocado daños en las áreas de producción.
El Senamhi indicó que estas condiciones generan mayor vulnerabilidad en los sistemas productivos altoandinos, donde la disponibilidad hídrica es limitada.
El impacto en la agricultura no se limita a Puno. En Apurímac, distritos como Lucre, Aymaraes, Huancaray, Curpahuasi y Chalhuahuacho experimentan síntomas de marchitez en cultivos de maíz amiláceo y productos de pan llevar.
El estrés hídrico favorece la presencia de plagas y enfermedades, mientras que los eventos extremos, como las granizadas, han ocasionado pérdidas parciales y, en algunos casos, totales de las plantaciones.
Ganadería y sostenibilidad en riesgo
La ganadería también enfrenta dificultades. En zonas como Pizacoma, Capazo y Mazocruz (Puno), el crecimiento de los pastos naturales es limitado, lo que reduce la disponibilidad de alimento para el ganado.
Esta situación incrementa el riesgo de enfermedades y abortos en animales, especialmente ante el descenso de las temperaturas nocturnas. El Senamhi recomendó asegurar la disponibilidad de agua limpia y reservas de forraje, como pacas de heno, para proteger a los animales más vulnerables.
En el Cusco, la falta de lluvias en localidades como Amachuro y Quiquijana también limita el desarrollo de los cultivos, con plantaciones que muestran bajo vigor vegetativo y mortalidad de plantas. El organismo estatal advirtió que las condiciones adversas podrían extenderse en los próximos días, agravando el impacto en el sector agrícola.
El Senamhi sugiere aplicar estrategias como el uso de abonos foliares antes y después de las heladas, mantener la humedad del suelo mediante riego complementario y monitorear de forma frecuente los campos para detectar la presencia de plagas.
Además, recomienda evaluar la humedad del suelo hasta una profundidad de 30 centímetros en sistemas de riego por aspersión, y realizar el deshierbo manual para evitar la proliferación de plagas.
Recomendaciones y llamado a la prevención
El Senamhi reafirma su compromiso de brindar información oportuna y confiable para apoyar la toma de decisiones en el sector agropecuario.
Exhorta a agricultores y autoridades locales a mantenerse atentos a los avisos meteorológicos oficiales, ya que la variabilidad climática podría generar nuevos eventos extremos. La persistencia de estos fenómenos amenaza la seguridad alimentaria y el sustento de miles de familias rurales.
Entre las recomendaciones emitidas, destaca la importancia de mantener la humedad del suelo para favorecer la polinización y la formación de granos, especialmente en cultivos que se encuentran en floración.
Para aquellos que presentan amarillamiento de hojas, se sugiere aplicar riegos localizados que ayuden a su recuperación.