La Policía Nacional (PNP) anunció la detención de 26 personas durante el paro nacional convocado por transportistas, al que se sumaron sectores como el de comerciantes. La protesta, que paralizó Lima por tercera vez en menos de 30 días, demandó mayor seguridad y denunció la extorsión.
A través de un comunicado difundido en sus cuentas oficiales, la institución identificó a los detenidos y detalló que están acusados de disturbios, extorsión y asociación con bandas criminales. Los arrestos incluyeron dos personas en Huánuco, cinco en Piura, 11 en Lima y Huacho, y otros 11 en Junín.
Comerciantes del emporio textil de Gamarra, en el distrito de La Victoria, también suspendieron sus actividades para protestar por la ola de extorsión que sufren. La Panamericana Norte, una de las principales arterias de Lima, lucía con una bandera gigante y con pancartas como “No más derrame de sangre” y “No más extorsión”.
El tráfico se redujo significativamente por la ausencia de transporte público informal y la suspensión de clases de colegios y universidades. En otros puntos del país, como Piura, Huacho y Huancayo, también hubo pequeñas manifestaciones con las mismas exigencias, aunque ninguna fue especialmente numerosa.
Según un documento interno difundido este martes por Epicentro, la estrategia de despliegue contempla el envío de un total de 880 agentes, distribuidos de la siguiente manera: 50 efectivos de las regiones policiales de Piura, Lambayeque, San Martín, Huánuco, Ucayali, Puno, Cusco, Junín, Ayacucho, Tumbes, Cajamarca e Ica, 80 de Arequipa, y 20 de Moquegua y Tacna.
Además, 80 agentes especializados serán enviados desde la Base ‘Los Sinchis’, especializada en la lucha contrainsurgente y antinarcóticos. De este personal, el 10% debe estar especializado en investigación criminal y el 90% en el control y mantenimiento del orden público, a excepción de los agentes de la Dirección Antidrogas, quienes conservarán su especialización funcional.
El plan contempla un servicio de 29 días, con posible extensión, pero hay problemas logísticos. Los viáticos, hospedaje y alimentación serán responsabilidad de las unidades ejecutoras respectivas, que deben coordinar con la Región Policial de Lima para asegurar las condiciones logísticas adecuadas, agrega el texto.
Otros policías enfrentan similares dificultades. El general Mauricio Quiroga, jefe policial de esa región sureña, declaró que los viáticos no son cubiertos por completo debido al uso del transporte institucional y aseguró que la PNP provee el alojamiento y la comida. “Ellos son Policía Nacional y el trabajo que realizan es a nivel nacional, para eso están formados”, señaló. En paralelo, el portal Informativo del Sur destacó que este traslado masivo de agentes ocurre en un contexto alarmante de aumento de extorsiones y asaltos en sus regiones de origen, lo que agrava la preocupación por la seguridad local.