El estrés que sobrelleva Ana Estrada ante los “comentarios hirientes” y la expectación sobre su eutanasia

En una entrevista con Infobae, la abogada Josefina Miró Quesada compartió el sentir de Ana Estrada después de que el Poder Judicial ordenara ejecutar un protocolo para cumplir su derecho a una muerte digna. En esta nota, repasamos algunos puntos claves de la conversación

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Estrada tiene 45 años y desde los 12 sufre polimiositis, una enfermedad que debilita sus músculos y la mantiene conectada a un respirador artificial durante casi todo el día.
Estrada tiene 45 años y desde los 12 sufre polimiositis, una enfermedad que debilita sus músculos y la mantiene conectada a un respirador artificial durante casi todo el día.

La salud de la activista Ana Estrada, quien logró que el Poder Judicial ordenara al Ministerio de Salud y al seguro social Es Salud respetar su decisión de “poner fin a su vida mediante la eutanasia”, se encuentra resquebrajada y sobrelleva, a la par, una “situación de estrés” ante el interés público que ha generado su caso.

“A ella le afecta mucho que haya personas expectantes de su muerte. Le genera una situación de estrés, a veces le llegan comentarios muy hirientes y siente una fuerte presión. Cuando menos indaguemos sobre [si está esperando que el protocolo esté listo para efectuar su decisión], mejor”, dijo esta semana a Infobae la abogada Josefina Miró Quesada, quien vio el caso desde la Defensoría.

Psicóloga y activista, Estrada tiene 45 años y desde los 12 sufre polimiositis, una enfermedad que debilita sus músculos y la mantiene conectada a un respirador artificial durante casi todo el día. Su firme decisión de conseguir una muerte digna, cuando ella misma lo decida, la ha convertido en el primer símbolo de la eutanasia en Perú.

Durante su batalla legal, ha reiterado que no quiere convencer a nadie, simplemente pide respeto por las libertades y derechos de los individuos y que desea poder elegir cuándo morir de una forma digna.

Estrada tiene 45 años y desde los 12 sufre polimiositis, una enfermedad que debilita sus músculos y la mantiene conectada a un respirador artificial durante casi todo el día.
Estrada tiene 45 años y desde los 12 sufre polimiositis, una enfermedad que debilita sus músculos y la mantiene conectada a un respirador artificial durante casi todo el día.

“Es algo realmente revolucionario tener el control sobre la muerte. Creo que a veces las personas rehúyen a hablar porque pensamos la muerte en términos violentos. A la sociedad, enferma por violencia, le molesta aún hablar de una muerte dulce, sin sufrimiento, donde se ejerza la máxima expresión de libertad. Esto choca con la visión hegemónica en la cual la hemos encuadrado”, añadió la letrada.

En otro momento de la conversación contó que se había reunido con Estrada el pasado domingo, pese a que en algún momento no quería recibir visitas. “Fueron días muy duros que se acentuaron por la decisión de una jueza en enero [que se abstuvo a ejecutar el fallo “por decoro”], sumado a la coyuntura de muertes por protestas, al tema de los cambios que iba a tener EsSalud con los prestadores de ventilación mecánica y finalmente el covid, que la dejó sin voz”, dijo.

Pese a esos impasses, este derecho se reconoció por primera vez en el país. La sentencia, emitida el sábado pasado, detalla que el seguro social tendrá que formar dos comisiones, la primera para elaborar un plan que especifique los aspectos asistenciales y técnicos de la decisión tomada y un protocolo de cumplimiento de su derecho a la muerte digna, y la segunda practicar la eutanasia propiamente dicha.

Además, ordena a Es Salud “a brindar todas las condiciones administrativas, prestacionales y sanitarias para el ejercicio del derecho a la muerte en condiciones dignas” de Estrada, “lo que deberá ejecutarse dentro de los diez días hábiles contados a partir del momento o fecha en que ella manifieste su voluntad de poner fin a su vida”. Todo este proceso tardaría aproximadamente en dos meses, “en el mejor de los escenarios”, según Miró Quesada.

Estrada tiene 45 años y desde los 12 sufre polimiositis, una enfermedad que debilita sus músculos y la mantiene conectada a un respirador artificial durante casi todo el día.
Estrada tiene 45 años y desde los 12 sufre polimiositis, una enfermedad que debilita sus músculos y la mantiene conectada a un respirador artificial durante casi todo el día.

De esa manera, el juzgado resolvió favorablemente la acción de amparo interpuesta por la Defensoría del Pueblo, que pedía “con celeridad y urgencia”, ejecutar la sentencia, puesto que ya había pasado casi medio año.

Como Ana Estrada “ha recibido tanta cobertura mediática, está expuesta también a muchos comentarios negativos que, por supuesto, le afectan. Todavía no nos damos cuenta de la dimensión que significa un caso de esta naturaleza y lo que significa que ella lo haya abanderado, que haya abierto el paso a muchísimas otras personas”, remarcó la abogada.

Además, confió en que “las siguientes noticias no sean malas en el sentido de bloquear o dilatar estos procesos, o que haya objeciones de conciencia de los doctores”.

“Con eso, solo quedaría decir que si Ana quiere seguir viviendo, bacán; si ya no puede más, que tenga el poder en sus manos. Al final, de lo que se trata no es de estar a la expectativa, sino de garantizar que esa decisión esté efectivamente en sus manos, que ella tenga el poder efectivo de decir cuándo sí, cuándo no”, zanjó.