Lío a la vista por la plaza extra en Champions de la siguiente temporada: hasta la República Checa podría adelantar a España

Lo que era un secreto a voces se convirtió en realidad hace poco menos de dos semanas, cuando la Champions anunció en sus redes sociales la medida con la que espera frenar la todavía viva Superliga. El nuevo formato -que entra en vigor el próximo curso- está basado en el sistema suizo y su clasificación sigue supedita a “méritos deportivos”. Algo en lo que hace hincapié la UEFA en el video de presentación con el que lanza un dardo a la Superliga, ya que la meritocracia es uno de los aspectos más cuestionados por los aficionados. La nueva Champions pasará de 32 a 36 clubes participantes. Estas cuatro plazas se conseguirán de diferentes formas.

Una va a parar a la Ruta de Campeones de la última ronda previa; otra irá para el tercer clasificado de la quinta liga en el ranking UEFA, en estos momentos Francia. Las restantes irán a parar a las dos federaciones con mejores resultados en competiciones europeas del año anterior. Los resultados de esta temporada ya van a contar para la temporada 2024-25, por lo que el quinto de La Liga podría participar en la Champions de la siguiente temporada, en el caso de que los conjuntos españoles logren grandes resultados en Europa y mejoren el coeficiente UEFA, hecho que no está sucediendo.

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Ni siquiera pese a la remontada del Atlético y la victoria del Barcelona ante el Nápoles. Ambos equipos se unen al Real Madrid como miembros de la Triple Entente española presente en los cuartos de final de Champions, pero no salvan la quema por completo. El desastroso papel de Osasuna -eliminado en la fase previa-, Sevilla -fase de grupos de la Copa de Europa-, Betis -ante el Dinamo de Zagreb- y Real Sociedad -contra el PSG en octavos- hicieron explotar las calculadoras. Más todavía tras el 4-0 encajado por el Villarreal ante el Marsella que parece irreversible.

Que España se adjudique la plaza extra de la Champions se antoja altamente complicado. El naufragio español era de proporciones tan grandes que incluso la liga de la República Checa -sí, han leído bien- podía arrebatar el quinto puesto en el ranking de ligas europeas. Ahora, tras la clasificación a cuartos de Atlético y Barcelona, es más complicada la gesta checa. España tiene tres equipos en la siguiente ronda de la Champions, pero el resultado del conjunto de los equipos españoles hace que nuestra Liga sea la última de las cinco principales en este particular ranking.

Llegados a estas alturas de la temporada, cada partido suma lo mismo, independientemente de la competición. Participar en cada ronda de Champions y Europa League da los mismos puntos. Mientras que en Conference, solo suma un punto jugar la semifinal y jugar la final. No las rondas anteriores. Por ello, asumiendo que el Villarreal será el siguiente equipo español en caer, se deben cumplir dos requisitos para que España opte a la plaza extra de Champions 2024/2025.

La primera es que la mayoría de clubes de otros campeonatos caigan en la siguiente eliminatoria y la segundo que el resto de equipos españoles cuaje una participación memorable para paliar tanta catástrofe. Esto significa que la final de la Champions sea española, habiendo llegado a ella ambos después de ganar todos los partidos, y que el tercer club alcance las semifinales del torneo sumando por victoria los dos partidos de cuartos de final. Las matemáticas no mienten y tampoco invitan al optimismo español.