Los síndromes gripales se extienden por España en plena época navideña. El virus ha llegado este año semanas antes de lo previsto y se espera que el país alcance el pico de contagios dentro de poco. Mientras tanto, los casos continúan al alza, aunque de forma más lenta: los datos del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) de la semana 50 del año muestran 195 casos de síndromes gripales por cada 100.000 habitantes, tres veces más que en los dos años anteriores, mientras que la tasa de la gripe supera ya los 440 casos por cada 100.000 habitantes.
El ritmo de la epidemia se ha ralentizado, pero mientras los hospitales sienten la presión, con un repunte en las visitas a urgencias y en los ingresos, que se incrementaron un 17% en la anterior semana. El virus este año no es más peligroso, pero sí más contagioso: la variante dominante en circulación es la gripe A, con un predominio del subtipo H3N2, conocido como “gripe K”. Este subclado lleva meses en circulación por los países europeos y es el causante de que la epidemia se haya adelantado un mes.
Con cada variante de la gripe, la presentación del virus cambia ligeramente. El ISCIII registra en cada temporada los síntomas más comunes que comunican los españoles contagiados por gripe. Tos, fiebre y malestar general vuelven a ser los más repetidos, aunque con algunos cambios.
Los síntomas más comunes de la gripe en 2025
Según los datos del ISCIII, el 85,5% de los pacientes presentan tos en esta temporada de la gripe, un síntoma ligeramente más común que en la misma semana de 2024 (79,9%). La fiebre (84,1%) y el malestar general (78,3%) aparecen en la mayoría de personas que acuden a su médico con un diagnóstico de gripe.
En esta temporada, la congestión nasal se ha vuelto más común: la padecen un 70,9% de personas, frente al 61,4% de la temporada pasada, superando al dolor de garganta (61,6%) y las cefaleas (46,2%). El dolor muscular o mialgia aparece también entre los síntomas más frecuentes, al igual que los escalofríos, aunque con menor asiduidad que en años anteriores.
Varias personas han comunicado sufrir también cambios en el gusto (13,7%), dificultad para respirar (12,9%), vómitos (12,2%) o diarrea (6,7%), aunque en menor porcentaje.
Diferencias con el virus respiratorio sincitial
Otro virus que ha ganado protagonismo este 2025 es el virus respiratorio sincitial (VRS), que afecta principalmente a niños pequeños y personas mayores. Este patógeno infecta las vías respiratorias y causa síntomas muy similares a la gripe o al resfriado, como la secreción o congestión nasal, tos, estornudos, fiebre leve y malestar general.
La gripe, sin embargo, suele empezar de manera más repentina e incluir fiebre alta, dolores musculares y de cabeza, además de tos y congestión nasal. Distinguirlos aun así puede ser complicado, pues no hay un síntoma único que sirva como indicador claro del virus que nos afecta. La única forma de estar 100% seguros es a través de una prueba PCR, que indique exactamente qué virus ha entrado en el organismo.