Algunas personas quieren tanto a sus animales que no quieren separarse nunca de ellos, tampoco en vacaciones. A otros simplemente no les queda otra opción: cuando las residencias de mascotas escasean o se vuelven demasiado caras y ningún amigo o familiar puede hacerse cargo del animal, viajar con él se vuelve imprescindible.
Sea cual sea el motivo, las redes sociales parecen mostrar el viajar con animales como toda una aventura, especialmente para el perro o gato que les acompaña, que tiene la oportunidad de descubrir un nuevo mundo junto con su dueño. Pero por muchas fotos y vídeos que se compartan en las plataformas digitales, “viajar con mascotas no siempre es tan bonito”, advierte el veterinario Alfredo Molina.
Desde su cuenta de Tiktok (@alfredomolinavet), advierte que llevar un animal de viaje puede ser todo un reto, tanto para el dueño como para la propia mascota. “Nos encanta viajar con nuestras mascotas y hacer esas fotos idílicas donde todo se ve perfecto y precioso, pero la verdad es que no siempre es así de bonito”, señala Molina.
Los problemas de viajar con gatos
“Por muy bonito que quede en redes, viajar con tu gato no es un capricho que debas tomar a la ligera”, advierte Molina. El veterinario asegura que “la mayoría de los gatos no disfrutan nada de los viajes”. “Los cambios de entorno, los traslados, los sonidos desconocidos... Todo les genera mucho estrés”, explica. Por ello “es muy probable que tu gato prefiera quedarse en casa con alguien de confianza antes que hacer un viaje que le provoque ansiedad”.
Si esto no es una opción y debes llevar al animal contigo, hay que seguir una preparación extra, según el portal web de Purina. Sus expertos recomiendan llevar objetos que le resulten familiares para que el gato se adapte bien a su nuevo entorno, como rascadores, juguetes y una cama cómoda.
Al llegar al alojamiento, el felino puede necesitar un tiempo para instalarse. Asegurándote que no puede escapar de la estancia, deja que explore la habitación a su aire, aunque puedes acompañarle en el proceso para que se sienta más cómodo.
Los problemas de viajar con perros
Aunque los perros no tienen tantos problemas para adaptarse a nuevos entornos, “no es tan sencillo como meterlos en un coche y listo”, advierte Molina. “Si no lo has acostumbrado desde pequeño a viajar, a cambiar de entorno y a cambiar de rutina, es posible que lo que parece idílico en redes se convierta en un drama para tu perro. Ellos necesitan preparación, paciencia y un entorno donde realmente puedan disfrutar”, explica.
Los viajes con mascotas, además, suponen retos extra para los dueños: no todos los alojamientos aceptan animales y, entre los que sí, muchos ponen limitaciones por peso o tamaño. Lo mismo ocurrirá con restaurantes o atracciones turísticas. Y si el coche no es el transporte elegido para el trayecto, trenes y aviones no suelen ser lugares acogedores. Los primeros solo admiten animales pequeños en España, mientras que los segundos les obligan a viajar en un ambiente que puede ser hostil para la mascota.
“Antes de planear ese viaje soñado con tu mascota, pregúntate: ¿lo hago por ellos o solo por mí? Porque viajar con animales no es ni una moda ni un accesorio para las redes sociales. Es un compromiso de asegurarse de que ellos también disfruten y estén cómodos. Y si no, mejor déjalos en paz en tu casa", concluye el veterinario.