Pedro Sánchez vuelve a reunirse con el gobierno de Marruecos. Tras más de dos años del encuentro en Rabat, las dos administraciones vuelven a verse las caras a final de este 2025. Como afirma Exteriores en su comunicado, llega en un momento de “excelentes relaciones” con el país vecino, a pesar de que las disputas entre los dos países son una constante desde hace décadas. Problemas territoriales, económicos o ideológicos han generado un vínculo con idas y venidas que ahora goza de gran salud. El giro de guion del Gobierno aceptando la autonomía marroquí como base de las negociaciones en el Sáhara Occidental fue clave.
La agenda de la reunión comenzará a las 10:00 de la mañana con la recepción de Sánchez al primer ministro marroquí en el Palacio de la Moncloa y los honores militares. Luego se realizará una reunión bilateral entre los dos mandatarios. Más tarde, ambos encabezarán la reunión plenaria de las delegaciones, donde se afrontarán los intentos para llegar a distintos acuerdos.
El encuentro no ha sido anunciado con un motivo concreto, pero es espera que se mantengan distintas conversaciones, algunas de ellas más incómodas. Volverán a abordarse cuestiones del Sáhara Occidental, que se entremezclan con asuntos económicos de las que quiere hablar Marruecos. A todo esto también se suma la cooperación en la migración, un eslabón clave en la relación de los dos países.
Sáhara Occidental: acuerdos y dudas en lo económico
El plan de Marruecos sobre el Sáhara Occidental está avanzando hacia su postura a pasos agigantados. La resolución de la ONU uniéndose a la postura que adoptó Sánchez, los acerca al control de la zona. No obstante, siguen habiendo demandas que tienen que negociar con el resto de países, como el dominio económico de la zona, a través de la zona pesquera o el control de los recursos.
La pesca ha sido un motivo de disputa entre Marruecos y la Unión Europea (UE) en los últimos meses. En 2023, se agotó el acuerdo hasta ese momento vigente. Un año después, el TJUE (Tribunal de Justicia Europeo) tumbó el pacto, considerando que era injusto incluir la zona del Sáhara Occidental como dominio marroquí.
Hace un mes, la Comisión Europea propuso renegociar un nuevo acuerdo, lo que recibió la celebración del ministro Planas. España se ve muy afectada por estas medidas, pues la UE tenía un acuerdo con Marruecos para que 93 buques de la flota española trabajaran en sus aguas, lo que quedó suspendido.
Además, en las últimas semanas se ha confirmado un nuevo acuerdo entre ambos países. Entidades públicas canarias, Proexca y Fedeport, participarán en la construcción de infraestructuras en Dajla, ciudad que el Frente Solidario denuncia como ocupada por Marruecos. El acuerdo refleja el acercamiento político y económico entre ambos, pero recibió la crítica del movimiento de liberación saharaui.
Cooperación entre las autoridades
En el pasado mes de octubre, celebraron en Rabat una reunión para reforzar el trabajo conjunto sobre migración, con altos funcionarios de ambos países. En el encuentro analizaron los retos surgidos por el tráfico de personas. La llegada masiva de personas desde Marruecos en momentos concretos ha provocado instantes de tensión.
Las autoridades colaboran habitualmente en cuestiones de control y seguridad, también en el ámbito del narcotráfico o en despliegues militares, como el encuentro realizado entre la Armada y el Ejército marroquí hace una semana, en el marco de la vigilancia del Mediterráneo por parte de misiones de la OTAN.