Así es como debes cuidar la flor de Pascua para que dure más allá de Navidad

La flor de Pascua, conocida también como poinsettia, se convierte en el centro de la decoración en muchas casas en España durante la temporada navideña. Esta planta no solo adorna los hogares, sino que también es considerada un símbolo de fortuna y de prosperidad. Desde finales de noviembre, los españoles llevan a sus casas estas plantas como una tradición navideña más, pero, ¿qué sucede con ellas el resto del año?

Para que estas plantas duren todo el año necesitan una serie de cuidados que sirven para que podamos reutilizar la flor año tras año. En Interflora, una tienda online de plantas, explican que, desde su compra en la época navideña, la poinsettia necesita una serie de cuidados específicos sobre la cantidad de luz, el riego y la temperatura.

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Durante el invierno, al igual que la mayoría de las plantas, la flor de Pascua también precisa de mucha luz natural, pero siempre lejos de corrientes de aire, tanto frías como calientes. Respecto a su riego, la planta debe tener humedad, pero no en exceso, de manera que basta con regarla una o dos veces por semana. Es una planta que puede permanecer en el interior, con unas temperaturas suaves que se sitúen entre los 16 y 21 ºC.

Interflora hace una división por estaciones para definir los cuidados que necesita la Flor de Pascua en cada momento del año en cuanto a temperatura, humedad y cuidado para que la planta llegue sana y salva a la siguiente Navidad. A partir de enero, termina la floración de la planta y se empiezan a caer sus hojas, sobre todo hacia finales de mes. En este momento, necesita mucha luz, poco riego y estar situada lejos de las corrientes. Durante el invierno hay que centrarse en el reposo y la poda de sus ramas, a las que hay que dejar con una longitud de 10 centímetros aproximadamente. Una vez podada, puedes proteger los cortes con cera de una vela. En este periodo podría aparecer alguna hoja de color verde porque aún no se ha secado.

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Con la llegada de la primavera, se puede trasplantar a una maceta más grande para ayudarla a crecer, o incluso al suelo, en caso de contar con un jardín. En esta época del año, es importante renovar el sustrato y que le aportes abono o fertilizante extra. Con estos cuidados, la Flor de Pascua llegará en las mejores condiciones para el verano. En esta época, aconsejan que reciban una gran cantidad de luz, pero no de forma directa. Lo importante de esta estación es irla preparando para su época de floración, por eso es recomendable regarla poco.

El otoño es una época crucial para la vida de la planta, ya que se empieza a preparar para la navidad. Por eso, desde finales de septiembre o principios de octubre, lo ideal es que pase entre 12 y 14 horas al día en una oscuridad total. Para ello, puedes tapar la planta durante la tarde-noche con un plástico oscuro o bien con un cartón grueso, que impidan el paso de la luz. Tableen necesita una mayor cantidad de riego, eso sí, sin pulverizar agua sobre las hojas, porque podría afectar a su aspecto.