Dani Alves rompe su silencio desde la cárcel: “No sé si ella tiene la conciencia tranquila, pero yo la perdono”

El exjugador del Barça concedió desde prisión su primera entrevista después de ser acusado de presunta violación a una joven en los baños de una discoteca de Barcelona. “No eché el pestillo, ella podía haberse ido”, explica

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Imagen de archivo de Dani Alves. (AP)
Imagen de archivo de Dani Alves. (AP)

Este martes se cumplieron cinco meses desde que Dani Alves fue detenido por presunta violación a una joven de 23 años en los baños de un reservado en Sutton, una discoteca de Barcelona. El que fuera jugador del equipo blaugrana ha intentado demostrar su inocencia a lo largo de toda la primera mitad del año, pero sigue en prisión, ya que existe un gran riesgo de fuga a Brasil, país cuyo acuerdo de extradición con España es inexistente. Ahora, una vez los magistrados han rechazado todos los recursos por parte de sus abogados, Dani Alves ha roto su silencio desde la cárcel.

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“Me he decidido a dar mi primera entrevista desde que estoy aquí para que la gente sepa lo que pienso. Que conozcan la historia a partir de lo que yo viví aquella madrugada en aquel baño”, comienza Dani Alves la entrevista que ha concedido en exclusiva a El Programa de Ana Rosa desde prisión. Alves ha defendido hasta ahora ante la justicia que la joven y él tuvieron relaciones consentidas aquella noche: “No sé si ella tiene la conciencia tranquila, si duerme bien por las noches. Pero yo la perdono. Nunca he hecho daño voluntariamente a nadie. Y a ella aquella noche tampoco”, reitera en la entrevista que da tras cinco meses encarcelado.

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Versión de Dani Alves sobre lo ocurrido

El exjugador de Barça y Sevilla, entre otros equipos, afirma que “hasta ahora se ha explicado un relato muy asustadizo de miedo y de terror, que nada tiene que ver con lo que pasó, ni con lo que yo hice. Yo entré detrás de ella al baño. Ni cerré la puerta con pestillo ni nada, permaneció abierta en todo momento. Ella podría haberse ido porque yo permanecí sentado prácticamente todo el rato sobre la tapa del váter. No hay ni una sola marca en su cuerpo que explique esa violencia con la que ella dice que la moví en baño. El rasguño es por permanecer de rodillas mientras me realizaba una felación”, asegura el brasileño.

Una vez dada su versión de los hechos, Dani Alves dio su punto de vista sobre lo que ocurrió después. “Todo lo que pasó y no pasó allí dentro sólo lo sabemos ella y yo. Esa madrugada, cuando la mujer con la que tengo el problema sale del baño detrás de mí, me quedo un rato junto a mi mesa. No estoy mucho tiempo porque era tarde. Estoy con mi amigo Bruno y se me acerca otra gente antes de irme”, explica.

Dani Alves y Joana Sanz.
Dani Alves y Joana Sanz.

“Al tiempo supe por las imágenes que cuando abandoné la discoteca por el pasillo de salida, pasé cerca de donde la mujer estaba llorando. Yo no la vi. Si la hubiera visto llorar me hubiera detenido para preguntar qué pasaba. Y en ese instante, si algún responsable de la discoteca me hubiera pedido que me esperara porque una joven aseguraba que yo le había agredido sexualmente, yo no me hubiera ido a casa. Esa misma noche me presenté en una comisaría a aclarar lo que ha pasado”.

Así se enteró de la denuncia

“A mí allí nadie me dijo nada. Salí de Sutton tranquilo. Llegué a mi casa. Me duché porque mi mujer ya dormía y me avergonzaba de la infidelidad y me acosté en otra cama. Regresaba a México a los dos días para jugar y en algún medio de comunicación se publicó que una joven acusaba a Dani Alves de agresión sexual. Llamé por teléfono a mi abogada y ella consultó con los Mossos y en los juzgados y me aseguró que no había ninguna denuncia y que podía viajar y salir de España con total tranquilidad. Por eso me fui”, continúa.

“A la única persona a la que tengo que pedir perdón es a mi mujer, Joana Sanz”, concluye desde prisión. Ahora, medio año después de lo ocurrido, deberá esperar entre rejas hasta que se celebre el juicio definitivo, el cual se espera para finales de año.

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