Cada 31 de diciembre, millones de espectadores en Estados Unidos y otras partes del mundo sintonizan la “Nochevieja en CNN” para ver a Andy Cohen y Anderson Cooper compartir bromas, anécdotas y momentos espontáneos en directo.
Más allá del espectáculo televisivo, la complicidad entre ambos presentadores se apoya en una amistad de décadas, una vida familiar activa y una admiración mutua que trasciende la pantalla, como relataron en una entrevista exclusiva con Parade Magazine.
Amistad con el paso de los años
La relación entre Cohen y Cooper se remonta a los años 90, cuando un fallido encuentro a ciegas marcó el inicio de una conexión que, con el tiempo, se transformó en una sólida amistad. “Fuimos juntos a Brasil, y creo que ese viaje fue un punto de inflexión”, recordó Cooper.
Por su parte, Cohen añadió: “Alrededor de la época en que conseguí mi programa, hace 16 años, la gente empezó a vernos juntos. Luego Anderson tuvo un talk show diurno y yo iba como coanfitrión. Después comenzamos a hacer giras juntos. Pero ya en los 90 viajábamos con amigos”.
Ambos coincidieron en que la relación evolucionó con los años. “No hablábamos como ahora ni éramos tan cercanos. Recuerdo que fue en tu fiesta de 40 años cuando empecé a verte de otra manera”, confesó Cooper. Mientras que Cohen destacó el valor de hacer reír a su amigo: “Me encantaba hacerlo reír”.
Paternidad y vida familiar
La paternidad es un tema central en la vida de ambos. Cooper, padre de Wyatt y Sebastian, y Cohen, padre de Benjamin y Lucy, compartieron experiencias y desafíos cotidianos. Sobre esto, Cooper afirmó: “No hago resoluciones de Año Nuevo, pero cada día intento ser mejor estando presente, sobre todo con mis hijos”.
Cohen, en cambio, confesó que su propósito recurrente es “pasar menos tiempo en el teléfono”, aunque reconoció que solo lo cumple durante unas semanas.
Las anécdotas familiares abundan en su vida cotidiana. El presentador Cohen relató: “Anderson y yo fuimos juntos a Disney World una semana. Fue uno de los mejores momentos del año. Fue genial compartir con los niños”.
La convivencia no está exenta de roces. Sobre una reciente discusión durante el viaje a Disney, Cohen la describió como “una pelea relámpago, como una inundación repentina. Apareció con fuerza y luego desapareció”.
Sobrevivir y disfrutar la nochevieja en directo
La transmisión de la Nochevieja en CNN se convirtió en un ritual tanto para los presentadores como para la audiencia. Cooper, conocido por su rigor periodístico, ve en la noche del 31 de diciembre una oportunidad para relajarse en televisión en vivo. “Es el punto brillante de mi calendario”, aseguró a Parade Magazine.
Cohen, quien se encarga de la mayor parte de la preparación, explicó: “Anderson tiene mucho cada día, así que mi equipo y yo hacemos el trabajo previo y lo integramos unos días antes. Así es como me gusta”.
La dinámica en pantalla refleja su relación fuera de cámaras. “Esto es como nuestras videollamadas. Lo que ven es lo que somos, para bien o para mal”, afirmó Cooper.
Asimismo, su colega añadió que, lejos de hablar de política o cultura pop, sus conversaciones giran en torno a sus hijos y asuntos personales: “La gente me pregunta todo el tiempo qué opina Anderson sobre tal tema, pero no hablamos de eso”.
Sobre la preparación del programa, Cohen detalló: “Estamos en una rutina. Tenemos un plan y un sistema. Ahora se trata de encajar muchas piezas. Buscamos invitados que hayan tenido un gran año y que sean divertidos”.
Anécdotas y experiencias compartidas
Las diferencias de origen y estilo de vida no impidieron que Cohen y Cooper forjen una amistad profunda. Cohen creció en los suburbios de St. Louis, mientras que Cooper es hijo de la socialité Gloria Vanderbilt y se crió en Nueva York. “No soy un Vanderbilt”, bromeó Cohen. Cooper replicó: “Dices que tuve la infancia que soñabas porque iba a Studio 54”.
Ambos reconocieron que, pese a sus diferencias, comparten muchas similitudes. “Nos gustan las mismas cosas, ambos estamos en los medios y somos los rostros de nuestras cadenas. Hay muchas personas que dependen de nosotros”, reflexionó Cohen.
En cuanto a la relación con el público, Cooper señaló que la gente suele acercarse más a Cohen: “Andy habla con todos y es muy visible en la calle. Yo soy más como un leopardo, llevo gorra y me muevo rápido”. A su vez, Cohen destacó que la gente disfruta verlos juntos: “Cuando nos ven juntos, se alegran. Pero Anderson intimida a algunos”.
Admiración mutua y balance personal
La admiración entre ambos es palpable. Cooper expresó: “Me encanta verlo como padre, creo que es increíble en eso. También admiro cómo es con sus padres y amigos. No conozco a nadie con tantos amigos cercanos como Andy. Se preocupa por todos”.
En una misma sintonía, Cohen devolvió el elogio: “Creo que es un gran padre. Es muy leal, muy amable y tiene una sensibilidad que la gente no imagina. Es un hombre de integridad personal y periodística a un nivel que muchos no creerían”.
La complicidad y el apoyo mutuo que comparten Andy Cohen y Anderson Cooper, relatados en su conversación con Parade Magazine, mostraron que, más allá de la fama y la televisión en vivo, la verdadera fortaleza de su vínculo reside en la confianza y la amistad genuina.