Este 5 de diciembre, Netflix estrenó El precio de una confesión, un thriller psicológico que reúne a dos de las actrices más prestigiosas del cine y la televisión coreana: Jeon Do-yeon y Kim Go-eun.
Con una buena dosis de misterio, drama carcelario y conflictos morales extremos, la serie de 12 episodios surge como una propuesta de thriller especialmente recomendada para quienes disfrutaron de k-dramas de estilo La gloria o Extracurricular.
La producción marca el regreso del director Lee Jung-hyo en el género del thriller, luego de éxitos como Crash Landing on You y Doona!, y también el reencuentro de las dos protagonistas a una colaboración conjunta, diez años después de la película Memories of the Sword.
Secretos y pactos imposibles
La trama sigue a An Yun-su (Jeon Do-yeon), una profesora de arte cuya vida aparentemente tranquila se derrumba cuando encuentra a su esposo brutalmente apuñalado en su estudio. La policía no tarda en convertirla en la principal sospechosa, y pronto termina en prisión preventiva, enfrentando un juicio que parece imposible de ganar.
En la cárcel aparece la segunda protagonista: Mo Eun (Kim Go-eun), una mujer enigmática que espera sentencia por envenenar a un matrimonio rico, un crimen que le ha valido el apodo de “la Bruja”.
Allí le propone a Yun-su un trato que cambia por completo el rumbo de la serie: ella confesará ser la responsable del asesinato del esposo de Yun-su, pero a cambio exigirá un favor siniestro ya que ella también necesita venganza.
El desarrollo posterior intensifica el misterio: ¿Quién es realmente Mo Eun? ¿Qué busca? ¿Puede Yun-su proteger a su hija sin cruzar líneas morales que jamás imaginó?
Para Jeon Do-yeon, una de las actrices más respetadas en Corea y ganadora del Premio a Mejor Actriz en Cannes en 2007 por Secret Sunshine, el proyecto fue un sí inmediato.
En una conferencia de prensa con medios locales, la intérprete explicó que aceptó participar antes incluso de leer el guion, motivada por su deseo de volver a trabajar con el director Lee Jung-hyo y por el atractivo de interpretar un thriller por primera vez.
Sobre Yun-su, dijo a The Korea Herald que es “un personaje luminoso por fuera, pero con una profunda oscuridad interior”.
Por otro lado, Kim Go-eun, una de las intérpretes más versátiles de su generación y reciente doble ganadora del Baeksang Arts Awards y el Blue Dragon Film Awards por Exhuma, también tuvo un primer contacto temprano con la historia: leyó un borrador del guion cuatro o cinco años atrás.
Según declaró a los medios, cuando supo que Jeon Do-yeon se había sumado al proyecto, pidió ser considerada de inmediato: “Solo pensé: puedo hacerlo. Por favor, llámenme”.
En pantalla, su personaje se mueve entre la calma impenetrable y una fragilidad apenas perceptible. Kim buscaba que Mo Eun sea “ilegible, alguien cuyas emociones no pueden descifrarse”.
Como proyecto, El precio de una confesión, había sido muy comentado en el medio ya que su proceso de desarrollo fue algo turbulento.
La serie nació de un guion de Kwon Jong-kwan, e inicialmente estuvieron vinculados las actrices Song Hye-kyo, Han So-hee y el director Lee Eung-bok (Sweet Home).
Tras diferencias creativas irreconciliables, el equipo dio un paso al costado. Una actualización de guion dio paso al reparto actual y a una historia más sólida en pantalla.
Además de Jeon Do-yeon y Kim Go-eun, el elenco está formado por Park Hae-soo (Squid Game), como el fiscal Baek Dong-hoon, obsesionado con obtener una confesión verdadera.
Asimismo, Jin Sun-kyu encarna al abogado Jang Jeong-gu, un defensor idealista que busca proteger a Yun-su; y Choi Young-jun como Jin Young-in, el abogado de Mo Eun.
Aunque la crítica coincide en que la primera mitad avanza con un ritmo más lento, las reseñas destacan que su segundo acto se desarrolla con más agilidad. El resultado es un relato “envolvente de inicio a fin”, aunque tenga imperfecciones en su ejecución.