"En virtud de la existente volatilidad de los mercados internacionales, de público y notorio conocimiento, la sociedad ha considerado aconsejable para el resultado de la Oferta Global prorrogar el período de la oferta". Así, de manera tan escueta como contundente, la "biotech" argentina Bioceres explicó que suspendía su oferta pública Inicial (OPI, o IPO en inglés).
O sea, no va a tocar, por ahora, la campanita en el New York Stock Exchange (NYSE). El comunicado fue remitido a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, donde la empresa también espera comenzará a cotizar.
Si bien la biotecnológica asegura que "resolvió suspender temporariamente el período de oferta", se especula con que al IPO no se concretará, por lo menos, hasta dentro de un mes.
Si bien la biotecnológica asegura que “resolvió suspender temporariamente el período de oferta”, se especula con que al IPO no se concretará, por lo menos, hasta dentro de un mes
Tercera prórroga
Como el período de oferta finalizaba el martes, la empresa había decidido extenderlo dos veces hasta al jueves. Todo en medio de días con fuertes bajas en los mercados internacionales, al ritmo de las previsiones de las tases de interés en Estados Unidos, y después de que dos firmas argentinas, Central Puerto y Corporación América, obtuvieron precios algo menores a los esperados en sus salidas a la Bolsa.
"Finalmente hemos hecho público el prospecto de Bioceres ante a SEC. La idea es poder darle información a los inversores para analizar su participación en nuestra oferta pública inicial. La compañía tiene la intención de emitir acciones localmente y también a través de ADRs en el mercado internacional, con listado en la Bolsa de Nueva York", explicaba hace unas semanas Federico Trucco, CEO de la compañía que cotizará con la sigla "BIOX".
"Ahora tenemos por delante dos semanas de análisis por parte de los inversores, y luego vamos a decidir si lanzamos o no la transacción", explicaba entonces el ejecutivo.
Bioceres, que desarrolla genética agrícola, ya había realizado otro intento por abrir parte de su capital a los mercados globales en 2015, pero también la suspendió por culpa de turbulencia en los mercados. Poco tiempo después concretó la compra del 60% de Rizobacter, otra agrícola local especializada en inoculantes.
Además de Bioceres, la alimenticia Molino Cañuelas, la productora de energía Genneia y la desarrolladora TGLT, que recientemente compró la constructora Caputo SA, tienen previsto comenzar a cotizar sus acciones.
Con información de Reuters.