El Gobierno decidió prorrogar “por el plazo de 90 días, a partir de la fecha de su vencimiento”, los beneficios fiscales para las empresas privadas de salud que habían establecido a comienzos del aislamiento social, preventivo y obligatorio. La nueva extensión se anunció a través del Decreto 695/2020, publicado este martes en el Boletín Oficial.
El documento, firmado por el presidente Alberto Fernández, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y los ministros de Salud, Ginés González García; Trabajo, Claudio Moroni, y Economía, Martín Guzmán, señala que es necesario continuar con esta asistencia a la medicina paga “ante la continuidad de los motivos que dieron lugar” a la medida originalmente.
Puntualmente, se trata de una iniciativa que fue decretada el 19 de marzo pasado y que estableció “un tratamiento diferencial a los empleadores y a las empleadoras correspondientes a las actividades relacionadas con la salud, en lo que respecta a las contribuciones patronales con destino al Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) y al Impuesto sobre los Créditos y Débitos en Cuentas Bancarias y otras Operatorias”.
De esta manera, a las empresas se les aplicó una “reducción del 95 por ciento en la alícuota” que pagaban normalmente y que tenía como destino el SIPA y se ordenó que el impuesto sobre los créditos y débitos en cuentas bancarias y otras operatorias” sean del 2,50% y del 5%, en las cuentas corrientes, cuando se trate de empleadores correspondientes a establecimientos e instituciones relacionadas con la salud.
En un principio, estos beneficios estaban vigentes solamente por un plazo de 90 días, pero después las autoridades nacionales decidieron extenderla por otros 60 días y ahora la prorrogaron una vez más, debido a que la Argentina aún se encuentra luchando contra la pandemia.
En los considerandos, las autoridades nacionales remarcaron “que se ha constatado la propagación del referido brote en numerosos países y la pandemia se ha extendido en todo nuestro continente y en nuestro país”.
En este contexto, consideraron que “resulta relevante coordinar esfuerzos en aras de garantizar a los beneficiarios y a las beneficiarias del Sistema Nacional del Seguro de Salud el acceso a las prestaciones médicas necesarias”.
Por esta razón, el Gobierno sostuvo “que se debe dar un marcado y fuerte apoyo” a " los establecimientos e instituciones” del sector médico, dado que “se encuentran especialmente comprometidos” en la lucha contra el coronavirus.
El lunes, el Ministerio de Salud de la Nación informó en el reporte vespertino que ese día se registraron 382 muertes y 8.713 nuevos casos positivos por coronavirus. Con estos datos, el total de infectados en todo el país ascendió a 350.867 y las víctimas fatales suman 7.366.
Además, la cartera conducida por Ginés González García precisó que actualmente hay 1960 personas internadas en unidades de terapia intensiva en toda la Argentina, por lo que el porcentaje de ocupación de camas en esos lugares es de 57,3% a nivel nacional y de 64,5% en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
Esta cifra es algo que mantiene preocupado al Gobierno ya que, a pesar de que por el momento no hay riesgo de que el sistema sanitario colapse, las autoridades no quieren que en algún momento eso pueda llegar a pasar: por eso, semanas atrás crearon un tablero de control interactivo, con el cual pueden hacer un seguimiento en tiempo real la ocupación de camas de terapia intensiva en el país.
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