Este miércoles The Coach Voice publicó un artículo escrito por Ricardo La Volpe, quien actualmente se encuentra sin club. El director técnico que se desempeñó al frente de la selección de México y Costa Rica de grandes equipos como Boca Juniors y Amércia de México, entre otros, contó detalles desconocidos de su carrera y dejó en claro cuál es su idea sobre el fútbol.
Como futbolista, La Volpe formó parte del plantel de la selección argentina campeona del Mundial de 1978 bajo el mando de César Luis Menotti, uno de los entrenadores que más le enseñó en su vida.
“El principio de mi idea como entrenador nació escuchando a Menotti durante cuatro años, desde la primera convocatoria en el 74’. Comparto su pensamiento: ser agresivo, manejo de pelota, defenderse con la pelota, salida clara y limpia… Todos los conceptos tácticos, pero también su lado de motivador. Hacía creer al jugador en sus posibilidades al cien por cien”.
Quien fuese suplente de Ubaldo Filliol en el certamen de 1978 disputado en la Argentina, reveló que caer en la llave más dura le permitió al equipo crecer y mejorar para finalmente quedarse con el título. Justamente tras perder con Italia en Buenos Aires, el local terminó segundo en sus zona y tuvo que medirse en el siguiente grupo ante Brasil, en Rosario, con el que empataron 0-0.
“Esos eran partidos en donde el equipo sintió que teníamos que responder, que necesitábamos hacer un gran trabajo colectivo para pasar de ronda. Superar ese momento tan difícil nos hizo más fuertes y nos permitió jugar la final aliviados y con libertad. Ante Holanda nos soltamos. La prueba está en que la final fue nuestro mejor partido del campeonato. Al menos así lo creo yo”
La Volpe se colgó entonces la medalla de campeón que hoy en día ya no lo acompaña, porque en 2006 la utilizó como para agradecer y motivar al plantel de México que disputó la Copa del Mundo de Alemania. Según él, haberle permitido trabajar durante 4 años al frente del combinado azteca fue algo que merecía un reconocimiento suyo.
“Poco antes de comenzar el Mundial fundí mi medalla de campeón del mundo de 1978 para hacer una medallita para cada uno de ellos. Una cuestión interna del vestuario. De entrenador a jugadores. Era mi manera de darles las gracias por lo que venían haciendo”.
Aquel seleccionado cayó en octavos de final ante la Argentina por 2 a 1 en el tiempo suplementario, tras la igualdad en un tanto durante los 90. “Verdaderamente habíamos sido superiores a Argentina. No lo digo yo, lo dijo el mundo. Pero Maxi Rodríguez decidió ese día poner el balón en un ángulo imposible para el portero en la prórroga. Eso también es fútbol".
La Volpe cerró su carta explicando que un DT apenas influye un 20% o 30% dentro de un equipo, pero que eso le permite a los futbolistas soltarse y alcanzar su máximo potencial. Pero para eso, también es necesario que se juegue al “fútbol si miedo”.
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