Pasaron más de cinco años de la dolorosa final perdida ante Alemania en el Maracaná. Podría haber sido la Copa de Messi en Brasil, un hito histórico comparable con la hazaña que logró Maradona ante Inglaterra en México.
Ser campeones del mundo en tierras brasileñas, un sueño que no se cumplió por una acción que pudo cambiar la historia. Iban 20 minutos del primer tiempo cuando Gonzalo Higuaín se encontró con el mejor escenario posible: en soledad, con la pelota dominada frente a Manuel Neuer.
“Fue una jugada inesperada, me tocó estar ahí y lamentablemente no lo pude concretar”, recordó en diálogo con Fox Sports, y justificó la decisión que tomó en ese momento: “Definí con lo primero que se me vino a la cabeza, no sé si hoy volvería a hacer lo mismo”.
El lamento nacional todavía provoca escalofríos. Dicen los expertos que en una final del mundo no se pueden cometer errores. Alemania lo cometió, pero el Pipita no lo supo capitalizar y Argentina desperdició la oportunidad de bordar su tercera estrella.
“Me agarra saliendo y de espalda. Me la dio un defensor a 15 metros y apenas me giré tenía el arco enfrente”, aseguró el delantero de la Juventus con una frase que despertó la polémica: “Se ve más fácil de lo que era”.
Ante la repregunta de Diego Latorre, sobre si se sintió intimidado por el contexto que generó el partido frente al combinado germano, Higuaín reveló que no pensó en nada. “Trato de jugar todos los partidos de la misma manera. La dimensión era otra, pero ahora miro para adelante, porque todavía me quedan años en el fútbol”, afirmó.
En la jugosa entrevista, el goleador del elenco de Turín no descartó un posible regreso a River, pero remarcó que en la actualidad extraña mucho los llamados a la Selección. El Pipita quiere una nueva revancha, aunque ahora sea el tiempo de Lautaro Martínez.
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