En el marco de la exposición multimedia “Dalí Alive” en el Museo Lume en Newfields de Indianápolis, ha surgido un enigma en torno a una acuarela perdida del célebre surrealista Salvador Dalí.
La muestra, que ocupa más de 2.800 metros cuadrados, ofrece una experiencia inmersiva al proyectar las obras del artista español en paredes y suelos e incluye cuatro acuarelas de Dalí pertenecientes a la colección del Museo de Arte de Indianápolis, parte del complejo Newfields.
Estas obras fueron creadas por Dalí para la ópera de 1714 del compositor barroco Alessandro Scarlatti, titulada La dama española y el caballero romano, producida por Lorenzo Alvary en 1961-62. Alvary, un bajo operístico húngaro-estadounidense, fundó su propia compañía para llevar a cabo la producción, en la que también actuó.
Dalí, conocido por su experiencia en el diseño de producciones teatrales, fue una elección lógica para esta tarea. La ópera narra un romance entre un centurión romano y una mujer catalana tras la caída del Imperio Romano. La producción recorrió ciudades como Venecia, Bruselas y París, y fue tan exigente físicamente que una bailarina se desmayó en el escenario durante una presentación en París.
Entre las acuarelas expuestas se encuentran Apotheosis (1961), que muestra los característicos relojes derretidos de Dalí, y Tragedy and Comedy. También se exhiben Musicians y The Elephants, que destacan los elefantes de patas largas, un motivo recurrente en la obra de Dalí.
Dalí tenía planes extravagantes para la ópera, como el uso de burbujas de perfume de Guerlain, aunque no logró obtener las burbujas cuadradas que deseaba. Una reseña de la revista Time describe varios incidentes durante una presentación en el teatro La Fenice de Venecia, incluyendo a Dalí lanzando pintura sobre un lienzo y sobre algunos espectadores, mientras vestía como un gondolero veneciano.
La colaboración entre Dalí y Alvary no fue pacífica, ya que el artista llevó al productor a los tribunales alegando que no se respetaba su visión creativa, aunque el caso fue desestimado. Los planes para llevar la producción a Londres y Nueva York fueron cancelados.
Esta es la primera vez que los diseños de set en acuarela de La dama española se exhiben públicamente después de más de 45 años. Alvary y su esposa Hallie donaron las pinturas al Museo de Arte de Indianápolis en 1973, con un acuerdo que prohibía su venta.
Sin embargo, el misterio persiste: originalmente había cinco acuarelas, pero solo cuatro están presentes en Indianápolis. La ubicación de la quinta acuarela sigue siendo desconocida, al igual que los diseños de vestuario, cuyo paradero es un completo enigma.