Atracaron a acordeonero vallenato, le robaron la camioneta y lo secuestraron: “Esos hombres deben arrepentirse”

El músico Dagoberto Osorio fue víctima de la delincuencia y tuvo que pedir ayuda a sus seguidores a través de las redes sociales

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Dagoberto Osorio sufrió por robo y secuestro - crédito @dagobertoosorio_oficial/Instagram
Dagoberto Osorio sufrió por robo y secuestro - crédito @dagobertoosorio_oficial/Instagram

La creciente inseguridad no solamente ha azotado a Bogotá, sino también al resto del país. En el corregimiento de La Guajirita, zona rural de Becerril, Cesar, ocurrió un robo a un vehículo y un secuestro, noticia que ha dejado en vilo a la comunidad de la región, más aún porque el afectado es un reconocido artista.

Se trata del acordeonero vallenato Dagoberto ‘el Negrito’ Osorio, con más de tres décadas al servicio de la música. Aunque desde hace algunos años se desempeña como solista y produce temas con letra cristiana, fue el acompañante en tarima del reconocido Farid Ortiz, cuando lanzaron éxitos como Para que no me olvides, De nada sirve llorar y Dímelo.

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En sus redes sociales, el músico tuvo que pedirles ayuda a sus seguidores para dar con mayor facilidad con el paradero del vehículo. “Acaban de robar camioneta negra marca Toyota TXL en Becerril, Cesar, placa MHX 743 de Barranquilla. Si tiene alguna información por favor comuníquese al 3208633031 o 3106720542″, se leía en una publicación que hizo en su perfil de Instagram.

Imagen de referencia. Este es el modelo de la camioneta que denunció ser robada Dagoberto Osorio, Toyota Prado TXL, negra - crédito Toyota
Imagen de referencia. Este es el modelo de la camioneta que denunció ser robada Dagoberto Osorio, Toyota Prado TXL, negra - crédito Toyota

“Tranquilo, que eso es para Dios glorificarse y le va a dar una nueva”; “En el nombre de Dios la tiene que encontrar bendito sea Dios, Dios tome el control de todo”, “La paz de nuestro Señor Jesucristo sea con usted y su equipo. Esa es la obra del enemigo el es ladrón y ataca a los hijos de obediencia: Mas a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan para bien” y “Ni la más remota idea de lo que han hecho esas personas... Dios es bueno y para siempre su misericordia”, comentaron los fanáticos del intérprete al pie de la foto, dándole ánimos.

Asimismo, el artista detalló cómo fueron las horas en las que los criminales lo mantuvieron privado de su libertad para poder quitarle sus objetos de valor, entre esos el carro.

“No fue fácil, casi seis horas secuestrado, aguantando insultos, pero el amor de Dios que está en nuestros corazones dice que amemos a vuestros enemigos y quiero decirle a la gente que se robaron el carro que los amo y no me voy a vengar, simplemente la justicia hay que hacerla y no me han robado a mí, le robaron al mismo Dios porque el que se mete con un cristiano se mete con Dios”, añadió en un video.

De la misma manera, contó que los sujetos entraron a la finca ‘Quijote’, en la que se encontraba tranquilamente departiendo, cuando de repente lo amordazaron, lo maltrataron y se llevaron la camioneta. No obstante, aseguró que no le desea al mal a los autores del delito, sino que recordó las enseñanzas bíblicas y dijo. “A esos amigos que no me han devuelto el carro, sepan que los amo. No hay que pagar mal con mal”, expresó.

Camioneta robada al acordeonero Dagoberto Osorio - crédito @dagobertoosorio_oficial/Instagram
Camioneta robada al acordeonero Dagoberto Osorio - crédito @dagobertoosorio_oficial/Instagram

A su vez, narró que hubo un momento espiritual en medio del robo. “Como soy evangelizador, intenté orar con ellos. Me lo impidieron y me amenazaron con separarme de mi esposa. Posteriormente, tres de los sujetos que quedaron con nosotros, intentaron robar las cuentas bancarias. Volví a orar, uno aceptó a Dios en su corazón y otro se puso a llorar”, rememoró.

A pesar de lo anterior, perpetuaron el delito. “Le echaron llave a la habitación. Comentaron que avisaban cuando podíamos salir. Pero, nunca lo hicieron. A la media hora, el niño salió por uno de los barrotes de la ventana y nos abrió la puerta. Se llevaron los celulares, así que caminé a una finca cercana y pedí ayuda. Luego puse la denuncia ante la policía”, conforme lo cita El Tiempo.

Otros de los presentes dieron sus versiones. “Nos llevaron a un sitio estratégico de la finca. Luego, nos quitaron los celulares e indicaron que podíamos contestar llamadas telefónicas, pero con alta voz. Cuando eso ocurrió, colocaron el arma en la cabeza y amenazaron con matarnos si los delatábamos”, expresó uno de los afectados según lo reseñado por el diario capitalino.