Horarios nocturnos, recargos festivos y nuevas reglas para los trabajadores de plataformas: las críticas de los empresarios a la reforma laboral que comienza a discutirse este martes

Pese a los múltiples espacios de discusión para concretar acuerdos, los críticos de la reforma siguen advirtiendo que esta podría traer más problemas que soluciones

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El 30 de mayo comienza la discusión de la reforma laboral en el Congreso. REUTERS/Luisa González
El 30 de mayo comienza la discusión de la reforma laboral en el Congreso. REUTERS/Luisa González

La polémica alrededor de la reforma laboral presentada por el Gobierno nacional continúa y es que pese a que se creía que tendría el apoyo de la mayoría de gremios y sectores, al día de hoy continúa recibiendo criticas que van desde los horarios hasta las nuevas reglas para las plataformas. La mayoría coincide en que, por un lado, va a aumentar el desempleo, y por otro, solo las grandes empresas pueden sostener lo que significa este cambio.

Pese a todos los contratiempos que ha tenido este proyecto, este martes 30 de mayo comenzará la discusión en la Comisión Séptima, pero pese a que desde la administración se ha prometido que busca dignificar el trabajo en Colombia y solucionar problemas del mercado laboral, como la informalidad, el desempleo y la brecha de género, los sectores, sobre todo los empresariales insisten en que este podría ser un golpe a lo económico y laboral que podría incrementar problemáticas ya existentes.

Por ejemplo, uno de los argumentos que más sé a fortalecido es el del desempleo que generaría y es que esta posición fue respaldada hasta por el Banco de la República, que en un análisis mencionó:

“Debido al aumento de los costos salariales, se estima que en el escenario medio la reforma podría reducir el empleo formal alrededor de 454.000 empleos, equivalentes a una disminución del 2,1% de la tasa de formalidad, en un lapso de entre tres a cuatro años. Por otro lado, el aumento planteado en los costos de despido podría tener efectos más grandes, pero a plazos mayores (alrededor de dos décadas). Sin embargo, estos últimos efectos son más difíciles de cuantificar por la menor disponibilidad de estimaciones de las elasticidades relevantes en la literatura”.

Por su parte, Bruce MacMaster en entrevista con la revista Semana, señaló que desde la Andi se ven muchas deficiencias que podrías “conducir el rumbo hacia la generación de pobreza”.

“Es absurdo que se esté haciendo en este año complejo, cuando tantas familias, tantos colombianos podrían terminar quedando sin empleo o teniendo que irse al mundo de la informalidad. Es una gran irresponsabilidad. Me parece que por querer complacer a algunas personas que históricamente, desde las centrales de trabajadores o desde el mundo sindical, han pedido reivindicaciones en particular, terminemos poniendo a todos los colombianos a pagar las consecuencias de decisiones mal tomadas”, comentó el presidente de la Andi.

Y agregó que desde el análisis que se ha hecho saben que los grandes y medianos empresarios pueden sobrevivir al cambio a pesar de la dificultad, pero que las pequeñas empresas y los emprendedores que hasta ahora se están consolidando es muy posible que desaparezcan: “Realmente la reforma es un sofisticado mecanismo para fortalecer a los conglomerados, porque conduce a que todas las empresas grandes tengan que integrarse verticalmente: que tengan su propio transporte, sus contadores, que todo su servicio de aseo y vigilancia sea interno, que desarrollen su software, que produzcan su materia prima”.

En esta misma línea, una encuesta de Fenalco advirtió que para sobrevivir lo primero que harán las empresas es tratar de reducir costos y en los casos más extremos comenzar a reducir la nómina para responder a las nuevas demandas de llegarse a aprobar la reforma como está hoy día planteada.

Los resultados mostraron, como lo recordó El Espectador, que: “El 55 % de los empresarios haría ajustes relacionados con la reducción de nóminas y disminución de personal; un 27 % evitaría al máximo la contratación de nuevo personal y un 71 % reduciría sus inversiones”.

Otra de las preocupaciones fue lo que señaló María Claudia Lacouture presidenta de la Cámara de Comercio Colombo Americana (AmCham Colombia), quien advierte que contrario a lo que se promete desde el Gobierno, la informalidad aumentaría de forma preocupante:

“Como los costos laborales se incrementarían de forma importante, los empresarios tendrían serias dificultades para generar el empleo en las mismas dimensiones que se está dando en la actualidad, lo que ocasionaría que la población opte por el rebusque o trabajo informal”, puntualizó hace un tiempo.

Asimismo, el CEO y fundador de Rappi, Simón Borrero advirtió que la reforma daña el modelo de las plataformas virtuales y generaría que casi el 90% de los trabajadores de esta sean retirados:

“Con la reforma tendríamos que cobrar $18.000 por un domicilio y eso restringiría el servicio a unos pocos, destruyendo el modelo de negocio y dejando sin ingresos a muchas personas”, agregó.

Por ahora la reforma tendrá que sobrevivir a la primera discusión, pero el futuro es incierto, pese a que el presidente de la Cámara de Representantes, David Racero, advirtió que de no lograr pasar en este primer semestre que finaliza el 30 de junio, podría hundirse con otras reformas presentadas.