Fetos y simios sin ojos se encontraron en laboratorio acusado de maltrato animal en Cali

Los animales aún no han sido trasladados, a pesar de las constates denuncias por maltrato

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Tras la denuncia, laboratorios tendrán que entregar monos aotus por maltrato animal. Crédito: Agencia de Noticias, UNAL
Tras la denuncia, laboratorios tendrán que entregar monos aotus por maltrato animal. Crédito: Agencia de Noticias, UNAL

Sigue en pie la lucha por rescatar a 112 monos nocturnos y monos búho capturados en un laboratorio del Centro de Investigación Científica Caucaseco Limitada y la Fundación Centro de Primates (FUCEP), para desarrollar una vacuna en contra de la malaria.

Desde hace años, estos animales viven sobre sus eses, en un corral improvisado, hecho con jaulas oxidadas y una cerca de alambres, que está cubierta por láminas de plástico, y son alimentados con concentrado para perros, mezclado con agua azucarada, al no contar con dietistas especializados en la alimentación de monadas (grupos de monos)

De acuerdo con un informe de City Noticias, en la última visita realizada por la Comunidad Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC) se identificaron fetos de la especie y algunos ejemplares de mono, sin ojos entre sus cuencas.

Al respecto, Magnolia Martínez, del área de investigaciones de laboratorio de la organización de Personas por el Trato Ético de los Animales (PETA), dijo en entrevista para el noticiario: “nosotros queremos que el resultado se no más dineros públicos para las personas que violan la ley. Esto tiene que ser muy claro”.

Refiriéndose a una inversión por más de 17 millones de dólares que fue concedida por los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos (NIH por sus siglas en inglés) al laboratorio y otra de 30 mil millones de pesos colombianos entregada por Colciencias. Razón por la que la Fiscalía General y el Ministerio de Ciencias estarían liderando una investigación en contra de la familia que maneja desde hace más 20 años el “centro de estudios”.

Los aterradores hallazgos, revelados por PETA, tras una investigación de 18 meses, en la que también fueron encontrados simios que habían perdido gran parte de su pelaje, con posturas anormales e, incluso, muriendo sin recibir atención veterinaria, llevaron a políticos y grupos de animalistas a pronunciarse en frente de la CVC que inició una investigación hace siete semanas.

Solo entonces, Gustavo Alberto Trujillo, biólogo de la corporación autónoma del Valle del Cauca se pronunció sobre el Estado actual de la monada: “se realizan visitas periódicas en las que se revisa que el plan de manejo que se impuso este cumpliéndose. Que se estén alimentándose adecuadamente y que se le esté dando un buen manejo, el aseo y todo lo que allí está contemplado”.

Mientras que, Catherine Morales, diputada de Cali, aseguró que los animales no han sido trasladados aún, porque no se han terminado de adecuar los espacios en los que serán acogidos: “Hay un plan de manejo en el cual los animales van a ser trasladados de manera adecuada. Pero al sitio al que serán trasladados siguen haciéndoosle adecuaciones pertinentes en este momento”.

Lo que supone un mayor tiempo de espera para los monos que, se presume, fueron secuestrados en bosques de la parte norte del país, por lo que, la Federación de Liberación Animal reaccionó en contra: “le exigimos a la CVC que saque a los animales de este centro, que los ponga en un lugar seguro, pero que, además, investigue los posibles delitos ambientales”, señaló Carol Ruiz, en entrevista para el noticiera.

Por lo que, la Corporación Autónoma Regional del departamento (CVC) aún debe ultimar los detalles sobre el traslado de la monada que, lastimosamente, representa un peligro para otros monos y para los seres humanos, por los experimentos a los que fueron sometidos, en un laboratorio que, desde hace más de 10 años, no cuenta con los permisos necesarios para mantenerlos en cautiverio, ni para realizar estudios en ellos.

Mucho menos, después de que, en más de 20 años de supuesta investigación, no se hayan logrado avances en la vacuna contra la malaria. Sobre todo, después d probarse que el 95% de los medicamentos probados en animales fallan en humanos.