La inflación interanual alemana en septiembre alcanzó el 10%, su nivel más alto en 32 años

La Oficina Federal de Estadística indicó que las principales razones del elevado índice corresponden a los enormes aumentos de precios de los productos energéticos y los alimentos

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Estación de transferencia del Enlace del Oleductto del Mar Báltico cerca de Lubmin, Alemania. 30 agosto 2022. REUTERS/Lisi Niesner/Archivo
Estación de transferencia del Enlace del Oleductto del Mar Báltico cerca de Lubmin, Alemania. 30 agosto 2022. REUTERS/Lisi Niesner/Archivo

La tasa de inflación interanual en Alemania se disparó en septiembre hasta el 10%, el nivel más alto en la Alemania reunificada, principalmente por los elevados precios de la energía, pero también de los alimentos, informó hoy la Oficina Federal de Estadística (Destatis), que confirma así los datos preliminares difundidos el pasado 29 de septiembre.

Así, el índice de precios al consumo (IPC), que se ha mantenido por encima del 7% durante siete meses, aumentó drásticamente respecto al 7,9% interanual registrado en agosto.

El presidente de Destatis, Georg Thiel, señaló que “con un 10%, la tasa de inflación alcanzó un nuevo máximo en la Alemania unificada” y precisó que “las principales razones de la elevada inflación siguen siendo los enormes aumentos de precios de los productos energéticos”.

“No obstante, observamos cada vez más subidas de precios en muchos otros productos, especialmente en los alimentos”, indicó.

Un billete de 9 euros en Alemania
Un billete de 9 euros en Alemania

Agregó que el fin del billete subvencionado de transporte público a 9 euros por mes y de la rebaja del carburante aumentó la presión al alza de los precios en septiembre.

Indicó que estas medidas temporales del segundo paquete de ayudas del gobierno “han tenido un efecto amortiguador sobre la inflación general entre junio y agosto”, que Destatis estimó en aproximadamente un punto porcentual.

Así, el aumento interanual de los precios en el transporte fue del 14% en septiembre, frente al 3,7% de agosto, el 5,4% de julio y el 8,3% de junio, mientras que en mayo, antes de la entrada en vigor de las medidas de alivio, había sido del 16,3%.

El fin del billete subvencionado a 9 euros y del descuento en los combustibles se refleja asimismo en la tasa de inflación respecto a agosto, con un aumento significativo del 1,9%.

Los estantes llenos con comestibles se muestran en un supermercado durante la propagación de la enfermedad coronavirus (COVID-19) en Berlín, Alemania, el 17 de marzo de 2020. REUTERS/Fabrizio Bensch/Archivo
Los estantes llenos con comestibles se muestran en un supermercado durante la propagación de la enfermedad coronavirus (COVID-19) en Berlín, Alemania, el 17 de marzo de 2020. REUTERS/Fabrizio Bensch/Archivo

Los productos energéticos se encarecieron en septiembre un 43,9% interanual, tras el 35,6% de agosto.

El precio de la energía doméstica aumentó de forma especialmente acusada, en un 51,8%.

Así, el precio del gasóleo ligero de calefacción se duplicó con creces, hasta un 108,4%, el del gas natural subió un 95,1%, y el de la electricidad, un 21%.

Los carburantes se encarecieron en septiembre un 30,5% interanual, frente al 16,5% de agosto, el 23% de julio y el 33,2% de junio, mientras que en mayo, antes de que entrara en vigor la rebaja de los carburantes, los precios habían subido un 41%.

El fin del impuesto reducido sobre los hidrocarburos es, no obstante, sólo una de las razones para el fuerte aumento del precio de los carburantes.

 EFE/JUAN CARLOS HIDALGO/Archivo
EFE/JUAN CARLOS HIDALGO/Archivo

Así, el encarecimiento de los productos energéticos se deben principalmente a las fuertes subidas de los precios de compra internacionales.

Además del aumento de los precios de todos los productos energéticos como consecuencia de la guerra y la situación de crisis, los problemas de suministro y las notables subidas de precios en las fases económicas previas influyen en la tasa de inflación.

Como consecuencia, se encarecieron también otros bienes y servicios, especialmente de nuevo muchos productos alimenticios, que con una subida de precios del 18,7% interanual, superaron la inflación general.

En general, el aumento de los precios se ha reforzado de forma sucesiva desde principios de año.

El encarecimiento se observó en todos los grupos de alimentos: subieron considerablemente las grasas y aceites -un 49%-, los lácteos y los huevos -un 29,1%-, la carne y los elaborados cárnicos -un 19,5%- y el pan y los cereales -un 18,5%-.

Una mujer cargando bolsas de compras en Berlín, Alemania, el 21 de diciembre de 2021. REUTERS/Annegret Hilse/Archivo
Una mujer cargando bolsas de compras en Berlín, Alemania, el 21 de diciembre de 2021. REUTERS/Annegret Hilse/Archivo

Sin tener en cuenta el impacto de la energía, la tasa de inflación se habría situado en septiembre en el 6%, y sin contar la energía y los alimentos, en el 4,6%.

Los precios de los bienes en su conjunto aumentaron un 17,2% interanual, mientras que los de los servicios sólo se encarecieron un 3,6%.

El IPC armonizado para Alemania, el que se calcula con criterios comunitarios, se elevó en septiembre un 10,9% en términos interanuales y un 2,2% respecto al mes anterior.

(Con información de EFE)

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