En medio de un debate en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes, el ministro de Salud, Fernando Ruiz, aseguró que la reglamentación del etiquetado frontal nutricional tardará más tiempo en entrar en vigor.
La ‘ley comida chatarra’ (Ley 2120 de 2021) fue promulgada el 30 de julio de 2021 y sancionada el 5 de agosto, y tiene como propósito principal el etiquetado frontal de advertencia en la alimentos ultraprocesados que excedan en azúcares, sodio o grasas.
Supuestamente, el etiquetado frontal en este tipo de productos debía empezar a circular en el país desde el próximo 1 de agosto. Sin embargo, el ministro destacó este jueves que eso no será posible. “El objetivo es antes del 16 de diciembre que entra en vigencia la 810, en lo que compete a estos temas, tengamos la modificación. Antes, yo tengo que decirlo con claridad, tranquilidad y honestidad, es imposible”, dijo.
Las organizaciones, movimientos y partidos políticos que impulsan la Ley 2120 de 2021, han manifestado en varias oportunidades que la resolución 810, a la cual se refirió el ministro este jueves, no cumple como implementación de la norma.
Una de las diferencias entre lo que dicta la ley y esta resolución se centra en el etiquetado de los paquetes de comida. El Gobierno nacional impulsa un etiquetado circular y se basa en la experiencia de países como Israel para implementarlos en el país mientras que los impulsores de la ley se basan en una etiqueta octogonal, la cual sería más efectiva para prevenir el consumo de este tipo de comida.
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“No existen estudios que demuestren que efectivamente la forma del etiquetado reduce la mortalidad efectiva por una causa cualquiera que sea de la obesidad. Como ministro de Salud me toca corregir eso porque el etiquetado no nos va a solucionar ese problema de la obesidad”, señaló en el debate en la Cámara de Representantes.
Uno de los congresistas que le respondió al ministro fue Mauricio Toro, representante a la Cámara de la Alianza Verde, quien aseguró que, “el ministro no gobierna para la ANDI sino para los colombianos. Su viceministro salió en La W en Semana Santa, diciéndole a la industria que adoptara el etiquetado circular de la 810, inferior a la ley y contraria a la ley”.
Pero en su intervención fue más allá y aseguró que: “este gobierno antepuso los intereses de la industria, y de los empresarios, ante los intereses de la salud pública de los colombianos. Lo más grave de todo es que el ministro, sin pena alguna, anunció que el etiquetado no entrará en vigencia en agosto, sino hasta diciembre, lo cual es totalmente contrario a la ley comida chatarra. Vamos a analizar qué acciones jurídicas interponer, pero este gobierno no puede descaradamente desconocer la ley y sus mandatos”, concluyó.
El ministro se defendió de lo que dijo Mauricio Toro. “Los congresistas que dijeron eso tiene que demostrarlo con pruebas e ir a las instancias que tenga que ir, porque los funcionarios que hayan caído en eso tendrán que asumir esa responsabilidad. Yo como Ministro de Salud no he dado ninguna instrucción en ese sentido, y ni tengo evidencia que alguno de mis funcionarios lo hayan hecho”, explicó.
Aunque desconoció las virtudes del etiquetado en la comida chatarra, el ministro mostró su preocupación por el aumento de las cifras de personas con obesidad en el país.
“En Colombia en todos los grupos de edad se ha venido mostrando un aumento de manera relevante e importante el exceso de peso, teniendo en cuenta que el sobrepeso tiene unas diferencias importantes con algunos grupos especiales y ciertos niveles de pertenencia étnica afectando afectando especialmente a la población afrodescendiente donde ya se evidencia en algunos departamentos”, indicó.
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