Corabastos le prohibió al Banco de Alimentos de Cundinamarca recoger más comida para población vulnerable

El Banco de Alimentos de Cundinamarca manifestó que Corabastos le negó la entrada a los voluntarios de su organización, que fueron a recolectar alimentos que no iban a ser vendidos pero que podían ser consumidos por familias en estado de vulnerabilidad.

“La Administración de Corabastos, liderada por Mauricio Parra, está limitando el ingreso de nuestros voluntarios, impidiendo que podamos llevar comida a los más necesitados. Mientras a nivel mundial los Banco de Alimentos ganan premios Nobel, a nosotros nos envían la policía”, explicó la organización a la emisora La W.

El Banco de Alimentos de Cundinamarca, una organización sin ánimo de lucro que trabaja por combatir la inseguridad alimentaria y la desnutrición de la población más vulnerable, estuvo recorriendo la central mayorista para rescatar alimentos que no iban a comercializarse para llevarlos a las familias más necesitadas de municipios como Soacha, Facatativá y Funza.

En la recolecta de alimentos para la población de Soacha, el pasado viernes 16 de octubre, los voluntarios del Banco fueron recibidos con policías. Según ellos, además de que se les prohibió la entrada, se les iba a inmovilizar el camión en el que hacen su transporte de víveres.

Esta búsqueda de comida en plazas de mercado que hace la organización para posteriormente donarla, tiene que ver con el desperdicio de alimentos que se ve estos lugares. Según el Banco de Alimentos de Cundinamarca, en Corabastos, por ejemplo, unas 160 toneladas de comida van a parar a la basura todos los días.

El gerente de Corabastos, Mauricio Parra, habló con la emisora La W y desmintió las cifras del Banco, aseguró que, “en la central no se bota comida, operamos hace 12 años con el Banco de Alimentos de Bogotá las 24 horas, que es la única entidad que, oficialmente, está autorizada para la recolección de alimentos”

A su vez, le explicó a la emisora que la condición del Banco de Alimentos de Cundinamarca no los acreditaba para la recolección de comida en su central, “no es viable autorizar el ingreso de fundaciones creadas por personas particulares, como es este el caso del Banco de Alimentos de Cundinamarca, pues esto implica abrir la posibilidad para que todas las fundaciones existentes reclamen el mismo derecho y, esto implicaría tener a miles de personas recolectando alimentos”.

Sin embargo, para el Banco de Alimentos de Cundinamarca aunque la labor del Banco de Alimentos de Bogotá es importante, no es suficiente pues, según ellos, el Banco de Alimentos de Bogotá solo puede aprovechar el 20% de las 160 toneladas que se desperdician al día.

La prohibición a la entrada del Banco el viernes tomó a la organización por sorpresa pues llevaban dos semanas trabajando en conjunto con los comerciantes de la central de Corabastos en la recolección de comida.

Hasta el martes 13 de octubre, la organización informó que habían recolectado 27 toneladas de esa central, y que una buena parte de esos víveres sería distribuida en Soacha, una de las zonas más afectadas por el hambre.

“Maravillosa la colaboración de los comerciantes, recolectamos ya 27 toneladas de alimentos que se entregaron al municipio de Soacha, Funza y Mosquera pero seguimos trabajando y hoy recolectamos 20 toneladas más para Soacha, allí la situación es difícil y siguen sacando los trapos rojos del hambre”, le manifestó, en su momento, Ricardo López, presidente del Banco de Alimentos de Cundinamarca a Caracol Radio.