Por qué el coronavirus puede ser también considerado como una enfermedad crónica

Científicos y especialistas comenzaron a estudiar con mayor detenimiento aquellos casos en los cuales los síntomas de la Covid-19 persisten en el tiempo

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Varias personas que tuvieron Covid-19 presentan síntomas meses después de haber recibido el alta (REUTERS/Ricardo Moraes)
Varias personas que tuvieron Covid-19 presentan síntomas meses después de haber recibido el alta (REUTERS/Ricardo Moraes)

El gran objetivo de la comunidad científica y los trabajadores de la salud es, por estos días, atender a los pacientes con coronavirus, evitar la propagación del virus y redoblar los esfuerzos para hallar una vacuna y un tratamiento efectivo contra la Covid-19. Sin embargo, hay muchas otras cuestiones que los especialistas ya comenzaron a estudiar, y que deben ser seguidas muy de cerca. Una de ellas es la persistencia de síntomas meses después de confirmada la infección en un paciente.

Los científicos están investigando por qué algunas personas siguen sufriendo las consecuencias del virus incluso tiempo después de recibir el alta. Este patrón cada vez preocupa más a las autoridades.

La revista británica The Economist planteó esta problemática en un artículo recientemente publicado bajo el título “Cuando el Covid-19 se convierte en una enfermedad crónica”.

La publicación cita el ejemplo de Laura, una joven británica de 20 años que contrajo coronavirus. Durante la enfermedad presentó los síntomas habituales de la misma: tos seca, fiebre, falta de aliento, pérdida del olfato, náuseas y fatiga general. Después de tres semanas de descanso y aislamiento, comenzó a mejorar. Sin embargo, cinco meses después de que se le detectara el virus, todavía no se recuperó del todo. Según reconoció, cada una o dos semanas el malestar se alivia, pero luego vuelven a aparecer algunos síntomas: “Cuando estoy mal ni siquiera puedo participar de las llamadas de trabajo porque si hablo demasiado no puedo respirar”.

Las autoridades siguen investigando el comportamiento del coronavirus (REUTERS/Yves Herman)
Las autoridades siguen investigando el comportamiento del coronavirus (REUTERS/Yves Herman)

A partir de las experiencias de estos meses, es normal que aquellas personas que sufrieron graves consecuencias respiratorias registren algunos problemas con el paso del tiempo. Por eso, ahora los médicos y científicos también están haciendo foco en aquellos “que nunca han estado lo suficientemente enfermos como para ser hospitalizados, pero que tampoco se han recuperado lo suficiente como para volver a la vida normal”.

“Se está haciendo evidente que una pequeña pero significativa proporción de los infectados tiene síntomas que persisten durante meses. La recuperación prolongada no es inusual para los pacientes hospitalizados por neumonía, una complicación frecuente de la Covid-19. También es común para las personas que han sido ingresadas en unidades de cuidados intensivos. Pero muchos clínicos dicen que la proporción de pacientes con problemas persistentes de Covid-19 es mucho mayor que la de otras enfermedades virales como la gripe. Los problemas también son más variados, a menudo incluyen síntomas pulmonares, cardíacos y psicológicos”, explicó Sally Singh, de la Universidad de Leicester.

Un artículo publicado en el British Medical Journal el 11 de agosto determinó que hasta 60.000 personas en Gran Bretaña presentaron síntomas a largo plazo.

Ian Hall, director del Centro de Investigación Biomédica de la Universidad de Nottingham, indicó que entre el 30 y el 50% de los pacientes hospitalizados por coronavirus presentan síntomas entre seis y ocho semanas después de haber sido dados de alta. Ese número, en tanto, aumenta aún más en pacientes que fueron internados en unidades de cuidados intensivos.

Para muchas personas abandonar la sala de terapia intensiva no es el fin del virus (EFE/ Juan Ignacio Roncoroni)
Para muchas personas abandonar la sala de terapia intensiva no es el fin del virus (EFE/ Juan Ignacio Roncoroni)

Pero los especialistas alertan que aquellos que transcurrieron con relativa calma la enfermedad, también son propensos a presentar síntomas a largo plazo. Más del 10% de ellos permanecen enfermos durante más de tres semanas, según un estudio de seguimiento de pacientes que sigue principalmente a pacientes americanos y británicos. Los síntomas que más se presentan en estas circunstancias son la fatiga, falta de aliento, dolores corporales y problemas cognitivos, que muchos describen como “niebla cerebral”.

Avindra Nath, de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, agregó que algunos pacientes con Covid-19 a largo plazo pueden sufrir condiciones no diagnosticadas, como diabetes o disfunción tiroidea. En otras personas, en cambio, los síntomas son similares a los que se observan en el síndrome de fatiga crónica.

No obstante, lo que más se presenta en la mayor parte de casos de coronavirus es el daño a los pulmones: “La inflamación agresiva lleva a la destrucción del tejido pulmonar y a la formación de cicatrices. Las cicatrices, a su vez, impiden el flujo de oxígeno de los pulmones a la sangre. Eso puede causar falta de aliento, incluso con un ejercicio ligero”.

Los especialistas explican que los problemas respiratorios también pueden surgir de otro efecto de la Covid-19: su tendencia a causar coágulos de sangre. “Cuando se forman en los pulmones, los coágulos pueden cortar el flujo de sangre, haciendo aún más difícil la absorción de oxígeno. Y el virus puede causar falta de aliento de una manera más sutil, también, al dañar el revestimiento de los vasos sanguíneos, lo que limita la cantidad de sangre que puede fluir a través de ellos”.

Para algunas personas el coronavirus se convirtió en una enfermedad crónica (REUTERS/Lucy Nicholson)
Para algunas personas el coronavirus se convirtió en una enfermedad crónica (REUTERS/Lucy Nicholson)

Las personas que tuvieron coronavirus también pueden presentar problemas coronarios, ya que el virus puede inflamar los tejidos que rodean el órgano, así como los vasos sanguíneos que transportan los nutrientes a él: “Eso puede debilitar el músculo cardíaco, y eventualmente llevar a una insuficiencia cardíaca”.

Clyde Yance, cardiólogo de la Universidad Northwestern, en Illinois, apuntó que “una lesión menor en el corazón puede eventualmente llevar a una insuficiencia cardíaca si persiste por mucho tiempo”.

Sobre lo que hay menos claridad hasta el momento son los efectos a largo plazo del coronavirus en el sistema nervioso y el cerebro. Algunas personas se quejan de dolores de cabeza, hormigueo y entumecimiento en los pies, y otros problemas neurológicos. “Los problemas que sugieren una disfunción del sistema nervioso autónomo, como latidos cardíacos irregulares, sequedad de boca y problemas gastrointestinales también son comunes”, aseveró el doctor Nath. Sin embargo, todavía no es clara la causa exacta de esos síntomas, como tampoco es claro por qué más de la mitad de los infectados pierde temporalmente el gusto o el olfato -o ambos-.

Mientras los científicos siguen investigando esto, en varios países, como Gran Bretaña y Bélgica, ya lanzaron programas especializados de rehabilitación de la Covid-19 para aquellos que se recuperaron de la enfermedad pero que siguen presentando algunos síntomas.

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