Las 5 claves de la jornada 38

Guardar

Nuevo

Madrid, 26 may (EFE).- Las cinco claves de la trigésimo octava jornada de LaLiga EA Sports:

En un club que se había malacostumbrado a no despedir como merecían a futbolistas que pasaban a ser leyendas, Toni Kroos saboreó un adiós al Santiago Bernabéu sin precedentes. Sintió la admiración eterna, la veneración del madridismo, agradecido por una década de gloria del centrocampista alemán. Cerebro de un equipo de leyenda.

La inmensa emoción del momento dejó en un segundo plano lo deportivo, la desconexión competitiva del Real Madrid ante un betis de circunstancias en su once, a una semana de disputar la final de la Liga de Campeones en busca de la decimoquinta. Carlo Ancelotti regresó a su equipo titular y a sus futbolistas les faltó la intensidad que demanda un partido oficial. Ganar LaLiga con tanta antelación, a cuatro jornadas del final, les ha permitido recuperar fuerzas. En Wembley deberán enchufarse de nuevo para superar el espíritu de lucha a la gran revelación de la 'Champions', el Borussia Dortmund.

El Barcelona cerró el curso con una victoria en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán sobre el Sevilla (1-2) que culminó con el último acelerón del conjunto azulgrana tras la derrota frente al Girona (4-2). Después de ese partido, acumuló cuatro victorias consecutivas (Real Sociedad, Almería, Rayo Vallecano y Sevilla) y aceleró para amarrar el segundo puesto de la Liga.

Sin embargo, sus tres últimos puntos y el correcto final del campeonato, no sirvieron más que para maquillar la conclusión del ciclo de Xavi Hernández tras dos temporadas y media en el cargo: en ellas, ganó una Liga y una Supercopa y este curso el Barcelona se fue de vacío, sin títulos y con un equipo que tendrá que resetearse con la más que probable llegada de Flick.

Poco más se podía añadir a una temporada inolvidable, la mejor de la historia del Girona. Cerrada su participación en la próxima edición de 'Champions' de un equipo cuyo objetivo inicial era la permanencia, asentarse en la máxima categoría para comenzar a alimentar el sueño de disputar competición europea. Lo ha logrado con un puñado de futbolistas que dejan su nombre para la posteridad. Con Míchel Sánchez al mando de un equipo de autor que enamoró con su fútbol y acaba a tan sólo dos tantos de ser el más materializador.

Solamente faltaba el broche de un premio individual y lo logró Artem Dovbyk con una nueva exhibición de pegada. El mal sabor de boca que se llevó en la penúltima jornada cuando al ser sustituido se enteró de los cuatro marcados por Sorloth al Real Madrid, lo enterró firmando un triplete al Granada en el último capítulo. Un 7-0 como final de fiesta en Montilivi. La exhibición futbolística como cierre a una campaña que será difícil igualar.

Después de terminar la temporada con una victoria en San Sebastián ante la Real Sociedad (0-2), el Atlético de Madrid cerró una temporada justa. No consiguió ningún título y al equipo se le ven carencias que tiene que corregir si en un futuro cercano quiere llegar al final de curso con opciones de pelear el título a grandes como el Real Madrid.

La cuarta plaza es el objetivo mínimo que Simeone y sus hombres cumplieron. Sin embargo, parece que el técnico argentino ya piensa en sobreponerse desde el verano. Cuanto antes mejor. Y eso pasa por remodelar una parte de la plantilla con nuevas adquisiciones y bajas. En la rueda de prensa posterior al choque ante la Real, Simeone fue claro: "Viene un verano importante para trabajar bien". Eso es lo que hace siempre el 'Cholo': trabajar. Con la temporada recién terminada, ya piensa en la siguiente.

Sin la necesidad de títulos para dejar huella, el final de temporada dejó numerosas despedidas en los estadios. El reconocimiento especial como entrenadores lo sintieron Javier Aguirre y Jagoba Arrasate. El mexicano, tras acariciar la Copa del Rey, deja el banquillo del Mallorca con ganas de seguir dirigiendo a sus 65 años y asumir nuevos retos. Todos sus jugadores lo abrazaron en cada uno de los dos goles que marcaron para remontar al Getafe en el Coliseum, que aplaudió también la figura repleta de carisma de uno de los personajes queridos del fútbol español.

"Lo vi venir y me asusté porque es un animal de cien kilos", bromeó en la celebración de Muriqi, con toda la plantilla mallorquinista detrás en el mejor gesto de agradecimiento que un técnico que puede sentir. El máximo favorito a esa plaza en el banquillo, Arrasate, se dio un baño de masas en El Sadar tras decidir cambiar de aires y cerrar un ciclo. Con el cariño del club navarro y la afición, un gran tifo previo al partido y manteo de sus futbolistas al final. Lágrimas con su hijo Niko al hombro en el adiós que todo míster sueña. EFE

rmm-jjl/og

Guardar

Nuevo