Qué es el polonio 210, la sustancia con la que fue asesinado un espía Alexander Litvinenko

Compartir
Compartir articulo
  163
163

Un juez británico reveló este jueves que el presidente ruso, Vladimir Putin, pudo haber aprobado un plan de la Agencia de Seguridad Nacional de Rusia (FSB) para asesinar a Alexander Litvinenko, un ex espía crítico del mandatario.

El agente murió en un hotel en Mayfair, en Londres, el 1 de noviembre de 2006. Su muerte tomó una fuerte repercusión a nivel internacional. Pero aún más cuando se supo que el espía había muerto envenenado por una sustancia letal conocida como polonio 210, que le fue puesta en un té.

Pero, ¿en qué consiste el polonio 210?

"El polonio es un elemento radiactivo que se produce naturalmente en cantidades pequeñas", explicó Simon Cotton, catedrático de Química en la Universidad de Birmingham, en el portal The Conversation.

El especialista aseguró que se trata de "una de las sustancias más tóxicas conocidas". "Según altas fuentes, es de hasta un billón de veces más tóxico que el cianuro de hidrógeno", agregó.

Hay cerca de 30 isótopos diferentes de polonio, que van en masa atómica de 194 a 218. El catedrático indicó que solamente difieren unas de otras en su número de neutrones. Sin embargo, "el único importante es el polonio 210".

LEA MÁS:

Su radiactividad, en tanto, se debe a la emisión de partículas alfa (iones de helio).

El hecho de que esas partículas son fácilmente absorbidas hace que sea sumamente difícil de advertir por los detectores de radiación.

Una vez que la sustancia tóxica ingresó en el cuerpo, existe la posibilidad de eliminarla por aspiración gástrica, a través de la succión de los contenidos del estómago o por lavado gástrico con agua.

No obstante, debe ser detectado a tiempo. De lo contrario, se vuelve letal para la persona que lo consumió.

Una vez que llega a la sangre, es probable que cause el síndrome de radiación aguda y la víctima muera a causa de una insuficiencia orgánica múltiple.

  163
163

¿Qué efectos produce en el cuerpo?

La radiación alfa rompe enlaces química, dañando las células y creando una gran cantidad de iones muy reactivos que pueden hacer un gran daño.

El polonio 210 provoca una reducción de glóbulos blancos. Esto hace que la persona se vuelva más susceptible a una posible infección y requiera de transfusiones de sangre y plaquetas, según explicó Cotton.

"El hígado, los riñones, el bazo y la médula ósea son objetivos particulares y se dañan masivamente por la radiación alfa", indicó.

Asimismo, hay un daño inmediato en el tracto gastrointestinal que causa náuseas y vómitos.

La sustancia también ataca los folículos pilosos, la parte de la piel que da crecimiento al cabello, razón por la cual Litvinenko perdió el pelo antes de morir.

Aunque el polonio 210 puede ser obtenido a partir de minerales de uranio, los expertos aseguran que hoy en día se puede hacer artificialmente bombardeando átomos de los metales de bismuto con neutrones.

Un experto que testificó en la investigación por el asesinato de Litvinenko reveló que el único lugar en el mundo que cuenta con esa línea de producción es una instalación nuclear cerrada en la localidad de Sarov, ubicada a unos 800 kilómetros de Moscú. Esto generó más sospechas sobre un posible asesinato perpetrado por la inteligencia rusa.