El video parece sacado de una cárcel del tercer mundo, de un país sumido en el caos y el descontrol, pero fue registrado en el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte. Puntualmente en el condado de Hertfordshire, ubicado en el corazón de Inglaterra.
Que haya imágenes grabadas con un celular ya sería motivo de preocupación, porque están terminante prohibidas dentro de las cárceles. Pero queda como una infracción menor frente a todo lo que revelan.
Drogas de distinto tipo, alcohol casero, música a todo volumen e innumerables objetos ingresados por contrabando, como televisores, equipos de música y una PlayStation. Lo único que no se ve en ningún momento es a los guardiacárceles.
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