, decía el mensaje que acompañaba
, de aspecto poco saludable, usando una prenda de
.
Las críticas no se hicieron esperar. "Asqueroso, eso no está 'bien vestido', está colgando de los huesos", escribió una de las personas que seguía a Stella McCartney y que, en repudio, dejó de seguirla.
"Una imagen abominable. Esta joven esta claramente enferma, y la imagen corporal utilizada muestra lo que está mal en el mundo de la moda", dijo otra.
Al percatarse de las feroces críticas que estaba recibiendo, la hija de Paul y Linda McCartney retiró la foto y la reemplazó por otra. En la nueva, se veía la misma prenda, pero usada por otra modelo, la británica Malaika Firth.
A diferencia de la anterior, se ve a una mujer delgada pero no en extremo. Incluso tiene otra vitalidad en el rostro.
No es la primera vez que McCartney es criticada por difundir una imagen de mujer potencialmente peligrosa. Recientemente, fue atacada por feministas cuando dijo que su última colección buscaba "celebrar la suavidad de la mujer, su fragilidad".
"La fuerza en sí misma en una mujer es un poco agresiva y no demasiado atractiva", agregó entonces.