Escándalo: el partido "sorpresa" español, financiado por Chávez

Podemos, la revelación de las últimas elecciones europeas, recibió millones de dólares del régimen venezolano. Su líder intentó una desmentida. No pagó impuestos por esa suma por haberlo hecho mediante una fundación

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 EFE 163
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Se mostraron como "la nueva política española". Se presentaron como "los indignados" que buscaban algo nuevo para su país. Se hicieron visibles por su presunta "transparencia". Sin embargo, los líderes del partido político Podemos adoptaron todos los vicios que decían aborrecer. Y para peor, los niegan.


Este grupo político -autoproclamado independiente de los poderes hegemónicos- recibió una suma millonaria por parte de los sucesivos gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro para financiar su think tank y presentarse finalmente como "la revelación" de las últimas elecciones parlamentarias europeas.


El monto asciende a 5 millones de dólares, lo suficiente como para instalar a un grupo ante la sociedad y financiar una campaña política basada en una supuesta austeridad.


El vínculo entre el chavismo y el Centro de Estudios Políticos y Sociales (CEPS) -la fundación de Podemos- iniciaron sus relaciones en 2002, cuando aún el ex caudillo bolivariano vivía y controlaba Venezuela a su antojo. Desde ese año, el flujo de dinero fue acrecentándose hasta sumar la cifra total. Los datos fueron comprobados mediante las cuentas depositadas en el registro de fundaciones del Ministerio de Cultura.


CEPS y Podemos tienen múltiples contactos. El principal es el del líder del partido político "formado" hace cuatro meses. Pablo Iglesias trabajó en CEPS entre 2006 y 2007, y a partir de 2008 fue parte de su directorio. El segundo de Iglesias, Luis Alegre, también fue directivo de CEPS, e Iñigo Errejón, jefe de campaña de Podemos, perteneció a la ONG "chavista" y era el encargado de firmar sus cuentas, según consignó el diario El País de España.


Las transacciones provenientes de Venezuela, por ser destinadas a una fundación contaban con importantes beneficios impositivos, lo que hacía más atractivos los montos recibidos.


"Hay muchos consultores que trabajan en Venezuela para partidos de la oposición y pueden cobrar 6.000, 7.000, 8.000 euros al mes. Ningún consultor de CEPS ha cobrado cantidades parecidas", intentó defenderse Iglesias en una tímida entrevista. Lo cierto es que durante más de una década, el régimen venezolano fue el único cliente de esta fundación.


Le ofrecieron un paquete amplio de servicios: desde clases magistrales sobre "globalización", hasta estudios al Banco Central Venezolano para determinar la percepción de la economía que tenía el pueblo de Venezuela. Al parecer, Chávez quedaba encantado con los resultados estadísticos.