El vicepresidente estadounidense a href="http://www.infobae.com/personajes/joe-biden-a2294" rel="noopener noreferrer" Joe Biden/a se encontró este martes con las nuevas autoridades de Kiev, al día siguiente de los llamamientos recíprocos de Washington y Moscú para hacer aplicar el acuerdo de Ginebra. Éste podría poner fin a la crisis en el este de Ucrania, actualmente en vías de convertirse en una insurrección separatista.
"Los Estados Unidos están al lado de Ucrania frente a las amenazas humillantes", sostuvo Biden; quien agregó: "Las elecciones de mayo podrían ser las más importantes de la historia de Ucrania".
"Las elecciones de mayo podrían ser las más importantes de la historia de Ucrania"
Biden llegó a Ucrania para brindar su apoyo al gobierno provisional. Se trata del primer alto responsable estadounidense que llega al país tras la visita del secretario de Estado John Kerry, el 4 de marzo pasado.
Por la mañana, Biden se entrevistó con el presidente interino Alexandre Turchinov, y más tarde lo hará con el primer ministro Arseni Yatseniuk, así como con varios parlamentarios.
Un comunicado del servicio de prensa del cuerpo Legislativo ucraniano informa que "Biden subrayó que los EEUU saludan y apoyan los cambios en Ucrania, y están dispuestos a conceder cualquier ayuda en ese camino".
Por su parte, Turchínov le aseguró a Biden que su país se plantea el objetivo de "renovar paso a paso las instituciones de poder, así como las relaciones entre los ciudadanos y el Estado".
Biden y Turchinov coinciden que criticar la intervención de Rusia en el conflicto
Además, denunció el incumplimiento por Rusia de los acuerdos de Ginebra llamados a contribuir a la estabilización de este país: "Lamentablemente, Rusia y sus unidades especiales terroristas que se encuentran en Ucrania no van a cumplir demostrativamente los acuerdos alcanzados en Ginebra", afirmó Turchínov durante la reunión con Biden.
Turchinov: "Rusia y sus unidades terroristas no van a cumplir los acuerdos"
Señaló que los prorrusos de nuevo recurrieron al uso de la fuerza al secuestrar ayer lunes al jefe de la policía de la prorrusa ciudad de Kramatorsk, uno de los focos de conflicto en el este de Ucrania.
Según una de las autoridades que acompaña al vicepresidente estadounidense, durante toda la visita éste insistirá sobre la necesidad de mantener "la unidad nacional" y llamar a "una puesta en marcha urgente" del compromiso firmado el jueves entre Ucrania, Rusia, los Estados Unidos y la Unión Europea (UE).
También tratará todo lo inherente a las etapas para una estabilización económica del país, que sufre una grave crisis en este aspecto.
En una rueda de prensa posterior a su encuentro con Yatseniuk, Biden se refirió a la anexión de Crimea a Rusia y aseguró que EEUU nunca reconocerá a la península como parte del territorio bajo control moscovita.
Además, advirtió a Rusia que "deje de apoyar a los hombres enmascarados con uniformes sin identificación que agitan la rebelión en el este de Ucrania", y aseguró que habrá más sanciones "si está conducta provocativa" no cesa.
También prometió a los funcionarios de KIev que Ucrania "no estará sola en este camino", en referencia a la asistencia militar y económica que tanto los Estados Unidos como la Unión Europea.
El difícil diálogo Rusia-EEUU
El lunes, el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, dijo precisamente que los Estados Unidos deben presionar a las autoridades de Kiev para que respeten los acuerdos asumidos la semana pasada en la reunión en Ginebra para poner fin a la crisis en Ucrania.
En comunicación telefónica con su homólogo estadounidense, Kerry, Lavrov "pidió al secretario de Estado que presione a Kiev para evitar que algunos demasiado impetuosos provoquen un conflicto sangriento, y llamó a los dirigentes ucranianos a cumplir estrictamente sus obligaciones", según un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores.
De su lado, Kerry llamó a Rusia a tomar "medidas concretas" para implementar el acuerdo cuatripartito para rebajar la tensión de la crisis en Ucrania.
En una llamada telefónica a Lavrov, Kerry "solicitó a Rusia tomar medidas concretas para ayudar a la aplicación del acuerdo de Ginebra", como llamar "públicamente a los separatistas a desocupar edificios", señaló la vocera Jen Psaki.
Este intercambio de llamadas tuvo lugar pocas horas después de la llegada a Kiev del vicepresidente Joe Biden, quien arribó para aportar su apoyo a las autoridades ucranianas pro-occidentales.
Manifestantes ucranianos piden que Rusia no intervenga en el este del país
Biden en refuerzo
Durante su visita de dos días, Biden reafirmará su apoyo al gobierno. La Casa Blanca amenazó con tomar nuevas sanciones contra el Kremlin, al que acusa de seguir atizando las tensiones en el este del país, en la peor crisis desde la Guerra Fría.
Antes de la llegada de Biden, Rusia acusó a las autoridades ucranianas de violar "de manera flagrante" el acuerdo alcanzado el jueves pasado en Ginebra con Ucrania, los Estados Unidos y la Unión Europea.
"El acuerdo de Ginebra no solamente no es respetado, sino que es violado de manera flagrante por las medidas adoptadas por los que usurparon el poder en Kiev", afirmó Lavrov en una conferencia de prensa en Moscú.
Un tiroteo en Pascuas reavivó las tensiones en Donetsk
El pacto quedó debilitado por un tiroteo mortífero el domingo en el este de Ucrania, y la negativa a dar marcha atrás de los militantes prorrusos que han tomado el control de una decena de ciudades en la región.
El acuerdo reclama a todos "los grupos armados ilegales" de Ucrania que entreguen las armas y cesen la ocupación de edificios públicos y otros lugares.
Washington advirtió al Kremlin, al que acusa de manejar los hilos de la rebelión en Ucrania, que el tiempo se está acabando para poner en aplicación los términos del acuerdo.
La Casa Blanca indicó que Biden, muy implicado en la crisis ucraniana desde su inicio en noviembre pasado, realizará consultas para ponerse al corriente de los últimos acontecimientos en el este de Ucrania.
Los Estados Unidos y sus aliados de la OTAN han reforzado su despliegue militar en el este de Europa, y tanto Washington como la Unión Europea se han comprometido a aportar ayudas multimillonarias para recuperar la economía ucraniana.
Moscú, por su parte, advirtió que no tolerará nuevas sanciones estadounidenses si fracasa el acuerdo e insistió en que dispone de miles de tropas desplegadas en la frontera.
Indicó que los líderes ucranianos, cuya legitimidad no reconoce, recurren a la fuerza contra los "manifestantes". También reclama que los manifestantes antirrusos de Kiev pongan fin a su ocupación de la plaza principal de la capital, en base al acuerdo de Ginebra.
"Las tentativas de aislar a Rusia son inútiles, porque aislar a Rusia del resto del mundo es imposible", señaló Lavrov.