Transformers, ayer y hoy

Surgida como propaganda para promocionar una nueva línea de juguetes, a la que los niños podían cambiarle la forma, la serie marcaría un hito en los 80. Tal fue el éxito de esas historias intrigantes, con impresionantes escenas de acción y batallas, que se generó una cadena comercial que hasta nuestros días sigue creciendo.

A principios de 1982, la empresa de juguetes Hasbro le encargó al dibujante John Romita el trabajo de adaptar los juguetes para su aparición en la televisión. El equipo realizó tres episodios que se emitieron algunos meses después de que se comenzaran a comercializar los primeros juguetes.

Tras el grandioso éxito, se ordenó la producción de la serie y hacia finales del 84 ya se emitía un capítulo por semana. Al año siguiente se habían realizado suficientes episodios y la serie se comenzó a televisarse cinco días por semana. Este fue el comienzo de lo que se conoce como Generación I.

Fue así que los Transformers comenzaron a conquistar los mercados. Juguetes, comics y miniseries en la pantalla chica. El mundo se asombraba con sus dos personajes preponderantes: Optimus Prime, líder de los Autobots y Megatron quien comandaba a los Decepticons.

La marca The Transformers fue innovando, sin perder su raíz, y así surgieron por ejemplo, los Dinobots y los Constructicons (figuras que se podían combinar para formar un robot de grandes dimensiones). También salieron al mercado los Pretenders, robots que se camuflaban dentro de una coraza y los Micromasters, vehículos muy pequeños que se convierten en robots. Y muchos más.

En 2004, el fabricante de juguetes selló un acuerdo con DreamWorks Pictures y Paramount Pictures para realizar la versión cinematográfica de la serie animada de los 80, que se estrenó hace unos días con un gran éxito en todo el mundo. La diferencia entre los clásicos Transformers de los 80 y los del siglo XXI (ver imágenes).