A dos meses de la detención de su expareja, acusado de violencia de género y privación ilegítima de la libertad, Lourdes Fernández volvió a encender señales de alarma entre sus seguidores y su entorno más cercano. La cantante de Bandana, que ha transitado un año especialmente difícil, se mostró en las últimas horas profundamente afectada por la muerte de su amiga Ariana Falcó Aureli. A través de sus redes sociales, compartió una serie de historias en las que expresó su dolor y dejó ver la vulnerabilidad que atraviesa.
Todo comenzó con un mensaje en Instagram donde Lourdes, visiblemente angustiada, compartió su tristeza por la pérdida de su amiga. En las imágenes, la artista apareció en situaciones cotidianas como tomar café mientras permanecía en la cama, pero con un semblante apagado y palabras que hacían referencia al dolor que sentía. La preocupación de sus seguidores no tardó en hacerse notar, y rápidamente la noticia llegó a los medios.
El equipo de Lape Club Social (América) se comunicó con Mabel, la madre de Lourdes, para conocer su estado actual. “Ella viene de pasar la Nochebuena con la familia. Estaba muy bien, se vino a quedar a dormir, estuvo súper y hasta la cargaba de que iba a verla a su show. El 25 fue a ver a su papá y al día siguiente me llama angustiada porque una bajista que tocaba con ella murió, le pegó muy mal”, relató Mabel, describiendo el súbito cambio de ánimo de su hija tras enterarse de la triste noticia.
La madre de la cantante profundizó en la conversación y admitió que la angustia llevó a Lourdes a replantearse su propia vida y todo lo que sucedió durante el año: “Me dijo que podía haber sido ella. Saben que yo no pregunto, dejo que cuente lo que siente. El domingo me volvió a llamar, yo estaba de guardia. Me cuenta que no podía dormir, que estaba angustiada… Obviamente veo sus historias y aunque en otro momento por ahí le sugería que las baje, no digo nada porque ella tiene que ver en qué estado se muestra”.
En diálogo con el ciclo televisivo, Mabel reconoció las dificultades para atravesar este momento: “Es muy difícil la ayuda. Está con un psiquiatra, pero es renuente a tomar la medicación y no se la puede obligar porque si no hay que declararla incapaz, lo cual ella no es. En el trabajo brilla, cumple sus compromisos, pero hay una parte de su psiquis que es todo un proceso…”. La madre remarcó que Lourdes continúa con sus contratos profesionales y mantiene activa su faceta artística, pero que las emociones más profundas requieren tiempo y acompañamiento.
Sobre la muerte de la bajista, Mabel explicó que, según lo que supo, fue a raíz de una leucemia. “Era joven, no sé si incluso más que ella. Yo le dije: ‘vivió lo que tenía que vivir’. En casa manejamos esa filosofía”, compartió, y agregó que el tema de la muerte siempre fue hablado en su hogar, aunque le sorprendió la intensidad de la reacción de Lourdes: “Me llamó la atención cómo reaccionó”.
La preocupación por el bienestar de la cantante también incluyó preguntas sobre su vida cotidiana. Mabel fue consultada acerca de si le preocupa que Lourdes viva sola. “No sé si es una recaída, ella está viviendo con una amiga y sus padres, por lo que no creo que consuma. Ella dice que no pero no lo sé. Está en recuperación y yo trato de no meterme más allá de lo que ella me cuenta”, respondió, dejando en claro que el proceso de acompañamiento es constante pero que respeta los tiempos y los espacios de su hija.