La conectividad inalámbrica está a punto de dar un salto significativo con la llegada de WiFi 8, el próximo estándar que promete resolver varios de los desafíos actuales en redes domésticas, corporativas y públicas.
Qualcomm, uno de los principales actores en el desarrollo de esta tecnología, presentó el pasado 23 de julio un adelanto de las capacidades clave que tendrá el nuevo estándar IEEE 802.11bn, conocido comercialmente como WiFi 8.
A diferencia de su antecesor, WiFi 7, cuyo foco principal fue alcanzar velocidades teóricas de hasta 46 Gbps, esta nueva generación no busca seguir incrementando cifras récord de velocidad.
En cambio, WiFi 8 pone el acento en algo más importante para el usuario común: la fiabilidad de la conexión, la baja latencia y la capacidad para funcionar sin interrupciones, incluso en los entornos más exigentes.
Menos cortes, más estabilidad con WiFi 8
Según Qualcomm, WiFi 8 “perfecciona y amplía las capacidades de sus predecesores” y “va más allá de las velocidades pico para priorizar un rendimiento fiable en condiciones reales difíciles”. Esto significa que no solo se busca que la red funcione rápido, sino que sea estable y predecible, incluso en lugares congestionados como estadios, aeropuertos o ferias tecnológicas.
Uno de los grandes avances que traerá este estándar es el concepto de Dominios Únicos de Movilidad (SDM, por sus siglas en inglés). Esta tecnología permitirá que, una vez conectado a un punto de acceso, un dispositivo no pierda señal ni tenga que volver a autenticar la conexión al moverse.
En lugar del clásico cambio entre routers o repetidores (roaming), WiFi 8 unificará varios puntos de acceso en una única entidad lógica, evitando cortes y mejorando la experiencia del usuario.
Mejora en condiciones adversas
El borrador de especificaciones del estándar IEEE 802.11bn establece mejoras claras frente a WiFi 7. Por ejemplo, se prevé un aumento del 25% en el rendimiento (throughput) en condiciones de baja señal, una reducción del 25% en la latencia para aplicaciones como realidad aumentada y realidad virtual, y una disminución del 25% en la pérdida de paquetes al cambiar de un punto de acceso a otro.
Estos avances son especialmente relevantes en un contexto donde el número de dispositivos conectados no para de crecer. Los wereables, las gafas de realidad aumentada, los sensores de salud y otros productos del ecosistema personal exigen una conectividad cada vez más sólida y de baja latencia.
Además, el auge de sistemas con inteligencia artificial también cambia las reglas del juego. Muchas de estas herramientas, que funcionan en tiempo real, requieren una conexión rápida, confiable y con mínima latencia para ofrecer respuestas inmediatas o sincronizar datos entre múltiples equipos.
WiFi inteligente, eficiente y multitarea
WiFi 8 también promete avances significativos en eficiencia energética. Esto impactará positivamente en la duración de la batería de los dispositivos, especialmente en aquellos que se mantienen conectados durante todo el día, como relojes inteligentes o sensores domésticos.
Otra de las características destacadas es la capacidad de manejar múltiples conexiones de manera simultánea. En la actualidad, los dispositivos suelen usar WiFi, Bluetooth y otras tecnologías al mismo tiempo. WiFi 8 mejorará la convivencia entre estas señales para garantizar una experiencia más fluida, sin interferencias o pérdidas de rendimiento.
Por otro lado, en espacios con alta densidad de dispositivos, los routers podrán coordinarse entre sí para evitar saturaciones. Esta funcionalidad es clave para mantener la calidad de conexión cuando muchos usuarios se conectan a una misma red, algo habitual en centros de trabajo, escuelas, centros comerciales o eventos.
¿Cuándo estará disponible WiFi 8?
Qualcomm estima que la versión final del estándar IEEE 802.11bn estará lista en 2028. Aunque aún faltan algunos años para su despliegue masivo, su desarrollo ya marca una hoja de ruta clara hacia un futuro con redes más inteligentes, estables y preparadas para los desafíos que impondrá el crecimiento exponencial de dispositivos conectados.
Cuando WiFi 8 llegue, no solo se tratará de una nueva generación más rápida: será una infraestructura diseñada para garantizar que todo funcione sin interrupciones, incluso en los entornos más exigentes. Una promesa clave para el futuro de la conectividad.