El fin de semana pasado, a horas de que haya entrado en vigencia el último DNU con las nuevas restricciones que estableció el Gobierno Nacional para contener la segunda ola de contagios de COVID-19, la Policía bonaerense intensificó los controles en los distintos puntos de ingreso a la provincia. Las imágenes del caos de tránsito en el ingreso a la Panamericana mano hacia el norte, en la Autopista del Oeste, la Autopista Riccheri hacia el Sur y en el Puente Pueyrredón se viralizaron al igual que las quejas de los ocupantes de los vehículos. El operativo incluyó toma de temperatura de manera aleatoria y responde a una decisión del Gobierno de Axel Kicillof.
El jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, lo definió como “un gesto de cuidado”, pero también “político”: “No somos hipócritas de tomar medidas y después no controlarlas”. En ese sentido defendió el control y el cierre de carriles que provocó embotellamientos y largas filas de autos en la cercanía a las salidas de la Capital Federal hacia Provincia. “Lo que está haciendo el Gobierno bonaerense es controlar todo lo posible”, remarcó pero admitió que con “17 millones de personas y 90 mil policías, es imposible controlar toda la provincia”. Por ello, más allá de las restricciones impuestas, manifestó que “apelamos a la responsabilidad y a la conciencia de las personas”.
“Fue una muestra de que la Provincia está controlando”, insistió y planteó que a la dirigencia se le venía pidiendo que “reforcemos los controles y ahora nos dicen que controlamos mucho. “Hay que ponerse de acuerdo en los reclamos que se le hace al Gobierno”, protestó y citó a Juan Domingo Perón para explicar cómo habría que limitar la circulación: “Como decía el General, de casa al trabajo y del trabajo a casa”.
“El pueblo bonaerense ha dado una muestra ejemplar de cuidados, pero obviamente hay casos puntuales de gente que no respeta”, dijo en relación a las fiestas clandestinas que suceden cada fin de semana: “Son una grandísima minoría”.
Bianco informó que las medidas tomadas por Nación y acatadas por Provincia el último mes tuvieron efecto ya que “esta semana cayeron los contagios un 18%” en territorio bonaerense. “Eso responde a que la gente en promedio se guardó y se cuidó”, y a que “la gente está asustada”.
“Las medidas que tomó el Presidente y que adoptó la Provincia han sido totalmente efectivas porque permitieron evitar el colapso del sistema sanitario, con otra semana de crecimiento de casos probablemente colapsaba -literalmente- el sistema sanitario de la provincia y de la Ciudad de Buenos Aires”, declaró el jefe de Gabinete de Axel Kicillof.
Además, para garantizar el cumplimiento de las restricciones, el Gobierno bonaerense dispuso de un sistema de sanciones económicas para quienes violen el DNU “que permite a los municipios establecer multas de hasta 500 sueldos básicos”, es decir de hasta 4 millones 300 mil pesos, precisó Bianco.
Sobre la interna que se desató en el Frente de Todos a partir del pedido de renuncia de Martín Guzmán al subsecretario de Energía Federico Basualdo por el descongelamiento de las tarifas y los subsidios que deberá destinar el Estado, sin mencionar al ministro de Economía, Bianco aseguró que “estamos muy conformes con las políticas que fue adoptando el Gobierno Nacional”, y citó como ejemplos el ATP, el IFE, Repro 2, y refuerzos en la AUH. Sobre los distintos gestos que tuvieron dirigentes del ala más dura del kirchnerismo, como Kicillof que definió a Basualdo como “un excelente funcionario”, dijo que no están “desautorizando” a Guzmán. “Podemos tener algún matiz, pero apoyamos firmemente las medidas que tomó el Gobierno Nacional”, concluyó.
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