¿Quién en su vida como escolar en el Perú no ha visto a uno de sus compañeros con ese cordón rojo en el hombro derecho que lo identificaba como autoridad entre todos los demás estudiantes?
Y es que para muchos estudiantes peruanos, el policía escolar es una figura que ha ido pasando de generación en generación hasta ser parte esencial de todos los centros educativos del país.
Pero lo que muy pocos saben es que esta figura tiene más de 70 años instaurada en el sistema educativo del país. Y esta es su historia.
La principal razón
La Policía Escolar en Perú surgió como una respuesta innovadora a los problemas de ausentismo, indisciplina y comportamientos negativos entre los estudiantes.
Luego de 33 años de servicio en su institución, Roca Bernard presentó el proyecto de la Policía Escolar el 31 de diciembre de 1948. La iniciativa fue autorizada, iniciándose como un plan piloto en las escuelas fiscales N.º 42 y N.º 431 del distrito del Rímac. Este proyecto, con el tiempo, ganó aceptación debido a sus buenos resultados.
El 11 de junio de 1951, mediante la Resolución Directoral N.º 15847, el proyecto de la Policía Escolar se formalizó, expandiéndose a otros centros educativos como el C.E. Malambito. En 1952, se estableció la Policía Escolar Femenina, con su primera implementación en el Centro Educativo N.º 404 Nuestra Señora de Caima.
En 1953, bajo el liderazgo del Dr. Jorge Basadre, Ministro de Educación, la Policía Escolar se instauró en el Colegio José María Eguren de Barranco, obteniendo carácter oficial en todas las instituciones educativas del país.
Para 1966, la Policía Escolar empezó a operar de manera descentralizada, ajustándose a las necesidades específicas de cada centro educativo. En este proceso, directores, profesores, auxiliares y miembros de la Policía Nacional organizaban y preparaban equipos de estudiantes para desempeñar funciones como Policías Escolares.
Héroe de la Policía Escolar
Un momento significativo en la historia de la Policía Escolar fue la heroica acción de Alejandro Sánchez Arteaga, Brigadier de la Policía Escolar, perteneciente a la Escuela Fiscal N.º 4451 del distrito de La Victoria.
En reconocimiento a su valentía, el Ministerio de Educación Pública de la época declaró, a través de la Resolución Ministerial N.º 8897, que la Escuela Fiscal donde estudió Sánchez Arteaga llevaría su nombre.
Además, se le designó como Niño Héroe del Perú. Desde entonces, cada 17 de julio se celebra en el Calendario Cívico Escolar el Día del Niño Héroe en su honor, coincidiendo también con el aniversario de la Policía Escolar.
Una gran ayuda
La Policía Escolar, desde su fundación, se ha centrado en mantener el orden y la disciplina dentro y fuera de las instituciones educativas, además de proteger a los alumnos de los peligros en la vía pública.
La historia de la Policía Escolar es un testimonio del compromiso de las autoridades peruanas con la formación integral de sus jóvenes. Esta institución no solo busca mantener la disciplina, sino también inculcar valores que fortalezcan el tejido social.
En ese sentido, la Policía Escolar sigue siendo un pilar fundamental en el esfuerzo por crear un ambiente educativo seguro y formativo, donde los estudiantes puedan desarrollarse como ciudadanos responsables y comprometidos con su comunidad.