Tumores carcinoides: causas, síntomas, diagnóstico y tratamiento

Dependiendo el tipo de síntoma que se presente, se puede conocer el nivel de gravedad de un padecimiento

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Los tumores carcinoides son un tipo de cáncer de crecimiento lento, que pueden aparecer en diferentes lugares de todo el cuerpo. Los tumores carcinoides, que son un subconjunto de tumores llamados tumores neuroendocrinos, suelen comenzar en el tracto digestivo (estómago, apéndice, intestino delgado, colon o recto) o en los pulmones.

Generalmente no producen signos ni síntomas hasta que la enfermedad está más avanzada. Los tumores carcinoides pueden producir y liberar hormonas en tu cuerpo que provocan signos y síntomas como diarrea o enrojecimiento de la piel.

El tratamiento para los tumores carcinoides suele ser la cirugía y puede incluir medicamentos.

Síntomas

Algunos tumores carcinoides no provocan signos ni síntomas. Cuando se presentan, los signos y síntomas suelen ser poco precisos y dependen de la ubicación del tumor.

Tumores carcinoides en los pulmones

Los signos y síntomas de los tumores pulmonares carcinoides comprenden:

Dolor en el pecho Silbido al respirar Dificultad para respirar Diarrea Enrojecimiento o sensación de calor en el rostro y en el cuello (enrojecimiento cutáneo) Aumento de peso, en particular, alrededor de la parte media del cuerpo y la parte superior de la espalda Marcas rosadas o moradas en la piel que parecen estrías

Tumores carcinoides en el tubo digestivo

Los signos y síntomas de los tumores carcinoides en el tubo digestivo comprenden los siguientes:

Dolor abdominal Diarrea Náuseas, vómitos e incapacidad de defecar debido a un bloqueo intestinal (obstrucción intestinal) Sangrado rectal Dolor en el recto Enrojecimiento o sensación de calor en el rostro y en el cuello (enrojecimiento cutáneo)

Cuándo consultar al médico

Si tienes signos y síntomas que te molesten o sean persistentes, pide una consulta con el médico.

Diagnóstico

Entre las pruebas y los procedimientos utilizados para diagnosticar los tumores carcinoides se incluyen los siguientes:

Análisis de sangre.

Si tienes un tumor carcinoide, es posible que tu sangre contenga niveles altos de hormonas segregadas por el tumor carcinoide o de subproductos que se generan cuando el cuerpo degrada estas hormonas.

Análisis de orina.

Las personas que tienen tumores carcinoides presentan niveles excesivos de una sustancia química en la orina que se produce cuando el cuerpo degrada las hormonas segregadas por los tumores carcinoides.

Pruebas por imágenes.

Las pruebas por imágenes, como la tomografía computarizada, la resonancia magnética, la tomografía por emisión de positrones, las radiografías y las exploraciones de medicina nuclear pueden ayudar al médico a precisar la ubicación del tumor carcinoide.

Una sonda o cámara que permite ver el interior de tu cuerpo. Es posible que el médico utilice una sonda larga y delgada equipada con una lente o cámara para explorar zonas en el interior del cuerpo.

Una endoscopia, que consiste en la introducción de una sonda por la garganta, puede ayudar al médico a ver el tracto gastrointestinal por dentro. Una broncoscopía, en la que se introduce una sonda por tu garganta hasta llegar a los pulmones, puede ayudar a encontrar tumores carcinoides pulmonares. Pasar una sonda por el recto (colonoscopia) puede ayudar a diagnosticar tumores carcinoides rectales.

Para poder ver el intestino delgado por dentro, tu médico puede recomendarte una prueba en la que se utiliza una cámara del tamaño de una píldora que debes tragar (cápsula endoscópica).

Extracción de tejido para hacer análisis de laboratorio. Se puede recolectar una muestra del tejido del tumor (biopsia) para confirmar el diagnóstico. El tipo de biopsia que te harán depende de la ubicación del tumor.

Una forma de obtener muestras de tejido es utilizar una aguja para extraer células del tumor. Otra opción puede ser a través de una cirugía. El tejido se envía a un laboratorio para realizar diferentes análisis y determinar qué tipos de células hay en el tumor y cuán agresivas son esas células al observarse con el microscopio.

Doctors consult over an MRI scan of the brain. (Getty)
Doctors consult over an MRI scan of the brain. (Getty)

Tratamiento

El tratamiento de los tumores carcinoides depende de la ubicación del tumor, de si el cáncer se ha propagado a otras partes del cuerpo, de los tipos de hormonas que segrega el tumor, de tu estado de salud general y de tus preferencias.

Entre las opciones de tratamiento del tumor carcinoide, se incluyen las siguientes:

Cirugía.

Si se detecta en etapa temprana, un tumor carcinoide se puede extraer por completo mediante una cirugía. Si los tumores carcinoides se detectan en una etapa más avanzada, tal vez no sea posible extraerlos por completo. En algunas situaciones, los cirujanos pueden intentar extirpar la mayor parte posible del tumor para ayudar a controlar los signos y síntomas.

Medicamentos para controlar el exceso de hormonas. Utilizar medicamentos para bloquear las hormonas segregadas por el tumor puede reducir los signos y síntomas del síndrome carcinoide y retrasar el desarrollo del tumor.

La octreotida (Sandostatin, Bynfezia Pen) y la lanreotida (Somatuline Depot) se administran mediante una inyección debajo de la piel. Algunos de los efectos secundarios de estos dos medicamentos pueden ser dolor abdominal, hinchazón y diarrea. El teloristat (Xermelo) es una pastilla que se suele combinar con la ocreotida o la lanreotida para intentar mejorar aún más los síntomas del síndrome carcinoide.

Quimioterapia.

La quimioterapia utiliza medicamentos fuertes para matar las células tumorales. Se puede administrar a través de una vena del brazo o en forma de pastilla. La quimioterapia también se recomienda para tratar tumores carcinoides avanzados que no se pueden extirpar con cirugía.

Terapia dirigida con fármacos.

Los tratamientos con medicamentos con diana específica se centran en anomalías específicas presentes dentro de las células tumorales. Al bloquear estas anomalías, los tratamientos con medicamentos con diana específica pueden hacer que las células tumorales mueran. La terapia con medicamentos con diana específica generalmente se combina con quimioterapia para los tumores carcinoides avanzados.

Medicamentos que le suministran radiación directamente a las células cancerosas.

La terapia de radionúclidos con receptores peptídicos combina un medicamento que ataca las células cancerosas con una sustancia radioactiva. En la

terapia de radionúclidos con receptores peptídicos

para tumores carcinoides, el medicamento se inyecta en el cuerpo, allí se desplaza hasta las células cancerosas, se une a las células y les administra la radiación directamente. Esta puede ser una opción para las personas con tumores carcinoides avanzados.

Tratamiento para el cáncer que se disemina al hígado.

Por lo general, los tumores carcinoides se disemina al hígado. Los tratamientos pueden implicar que se realice una cirugía para extirpar parte del hígado, bloquear el flujo sanguíneo hacia el hígado (embolización de la arteria hepática) y usar calor y frío para matar las células cancerosas. La ablación por radiofrecuencia es un tratamiento con calor que mata las células tumorales carcinoides que se encuentran en el hígado. La crioablación utiliza ciclos de congelación y descongelación para matar las células cancerosas.