Valladolid, 8 mar (EFE).- El Recoletas Atlético Valladolid visita mañana la "difícil" cancha de El Sargal, que se ha convertido en una "asignatura pendiente" para los vallisoletanos, puesto que no ganan allí al REBI Cuenca "desde hace cuatro o cinco años" y, además, llegan a esta cita "con la moral tocada".
Lo ha advertido el técnico del cuadro azulón, David Pisonero, en rueda de prensa, en la que también ha señalado que es una pista en la que le gusta "especialmente" jugar y que se presenta como "un reto apasionante", ante un rival "tremendamente correoso".
"En El Sargal hemos hecho buenos partidos, pero no hemos sido capaces de puntuar, y con esa intención vamos, aunque somos conscientes de que va a ser un choque muy complicado, porque Cuenca no nos deja tener continuidad ni imponer la velocidad de juego que nos gusta", ha analizado.
Además, el cuadro manchego "defensivamente, sigue igual de duro" y, cuando le ves "a pleno rendimiento", como en la anterior jornada, ante Sinfín, en tierras cántabras, "es un equipo que asusta", aunque este año le ha costado más enlazar la rutina de temporadas anteriores.
De hecho, en el encuentro disputado ante Torrelavega, este les ganó "con más facilidades de las previstas", pero han sido capaces de reaccionar y hacer un "magnífico" partido en Santander, ha precisado el entrenador vallisoletano.
En su opinión, la llegada del central francés Tchitombi les ha dado "más poso", porque se ha acoplado "muy rápidamente al juego", gracias a su estilo, que le va a Cuenca "como anillo al dedo" y que se añade a lo que ya tenían "con Espinha parando en la portería, o la dureza de Juanjo Fernández, Pozzer y Vera en defensa".
"Veremos un partido de lucha de mandos y, en este sentido, tenemos que ser listos para tratar de llevar nuestro ritmo", ha añadido Pisonero, quien confía en que la dolorosa derrota sufrida ante Torrelavega en Huerta del Rey no les pase factura, y puedan coger "la rutina de juego que tan buen resultado dio en la primera vuelta".
También ha confiado en que, jugadas como la que derivó en el último gol de Torrelavega, para cerrar el marcador con victoria visitante, sirva para "estar, defensivamente, más inteligentes", ya que se les fue un punto "por una acción de viveza del rival".
Para esta jornada ante Cuenca, seguirá contando con Pipe García y Enrique Llorente en la portería, tras confirmarse la baja de larga duración del guardameta César Pérez, quien será intervenido de la rotura del ligamento cruzado de la rodilla en los próximos días.
Al respecto, ha comentado que están "como locos" intentando reforzar esta posición, "pero el margen de maniobra no es sencillo y, además, la lesión de César también condiciona el puesto para el año que viene".
"Esperamos que nos digan a qué jugadores se puede acceder y a cuáles no para poder fichar", ha apuntado Pisonero, quien tiene claro que "hoy por hoy, con porcentajes de portería bajos, es imposible que se puedan atacar puntos", lo que no quiere decir que no tenga confianza en sus jugadores, sino que considera que "ambos necesitan de un tiempo de adaptación", ha concluido. EFE
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