Kiko Rivera e Irene Rosales han puesto fin a su matrimonio tras once años de relación. Su ruptura salió a la luz este miércoles, 27 de agosto, cuando Semana reveló en exclusiva sobre el fin del matrimonio de la entonces pareja. Ambos se conocieron en el año 2014 y, aunque al principio solo había una amistad entre los dos, pronto empezaron a construir su historia de amor. Dos años después de haber iniciado un noviazgo, decidieron pasar por el altar y, juntos, formaron una familia con la llegada de sus dos hijas. Sin embargo, su relación de amor no llegó a buen puerto.
Si bien fue el hijo de Isabel Pantoja el primero en pronunciarse al respecto de su reparación, ahora Irene Rosales ha emitido un comunicado en sus redes sociales. “Buenos días, familia. Como ya sabéis, después de 11 años ha llegado el momento de que Kiko y yo tomemos caminos separados”, ha comenzado a decir en un story de Instagram, donde acumula más de 700 mil seguidores.
De acuerdo con el testimonio de Rosales, su ruptura con el DJ “ha sido una decisión dura, nada fácil, pero ambos necesitamos seguir nuestras vidas por caminos separados”. “Hay mucho cariño, hay unión y, sobre todo, mucho amor por la familia que hemos formado”, ha subrayado, dejando claro que entre ambos persistirá el cariño que siempre se han procesado. “Eso seguirá siendo así”.
Al igual que hizo Kiko Rivera, Irene Rosales también ha dejado claro que su prioridad ahora serán sus dos hijas en común. “Aunque nuestra relación como pareja haya llegado a su fin, nuestro vínculo familiar siempre estará. Tenemos dos niñas preciosas que se merecen recibir todo el amor, cariño y cuidado de sus padres y así será siempre”, ha concluido.
Separados desde haces meses, pero conviviendo
De acuerdo con la información manejada por TardeAR, la expareja lleva meses separados, aunque no ha sido hasta ahora cuando se ha conocido su ruptura. Y es que, por el bien de sus dos hijas, Irene Rosales y Kiko Rivera tomaron la decisión de continuar viviendo bajo el mismo techo para facilitar la adaptación de sus hijas a la nueva situación y procurar que el cambio en sus rutinas personales resultase lo menos brusco posible.
Según fuentes cercanas a la familia, su ruptura responde a una decisión consensuada y meditada y en ella no existen terceras personas involucradas. “Aunque Irene fue quien más peleó por salvar la relación, ha llegado un punto en el que no podía más. La decisión final y real de terminar ha sido de ella. Kiko no se esperaba que Irene fuese tan firme en su decisión”, detalló Leticia Requejo en el espacio de Telecinco, dejando entrever que habría sido esta quien decidió dar el paso de poner punto y final a su historia de amor.
“Me dicen que él, después de la ruptura, se siente absolutamente liberado y que es ella la que está fatal porque la modelo lo considera un fracaso tras haberlo intentado todo”, agregó Kike Quintana, sobrino de Ana Rosa Quintana.