La OCDE rebaja al 1,4% su previsión de crecimiento del PIB de España en 2024

Pese a recortar cinco décimas la previsión de junio, la organización espera que el crecimiento de la economía española siga siendo uno de los mayores de la zona euro, por encima de la media estimada del 0,9%

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La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, en una imagen de archivo. (Matias Chiofalo - Europa Press).
La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, en una imagen de archivo. (Matias Chiofalo - Europa Press).

Las previsiones económicas semestrales publicadas este miércoles por la OCDE rebajan en cinco décimas el crecimiento estimado del PIB de España para 2024, del 1,9% avanzado en junio al 1,4% actual. Esto supone una cifra notablemente inferior a la que calculó el Gobierno en el Plan Presupuestario de octubre (2%) y también se encuentra ligeramente por debajo de lo que esperan otros organismos como la Comisión Europea, que actualizó sus previsiones este mismo mes y adelantó un 1,7%.

Pese al mayor pesimismo, el crecimiento de la economía española se espera que siga siendo uno de los mayores de la zona euro, por encima de la media del 0,9% que anticipa la OCDE y de sus principales socios, que son Francia (0,8 %), Italia (0,7 %) y Alemania (0,6 %). El organismo prevé que el PIB de España avance un 2,4% en 2023, más de lo que se había previsto inicialmente y en línea con los cálculos del Gobierno, y para el 2025 anticipa un 2%.

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Según explica el informe, el menor crecimiento respecto a 2023 se debe al impacto esperado de las subidas de los tipos de interés sobre el consumo y la inversión y el menor dinamismo de las exportaciones por la situación de ralentización económica en la Zona Euro y la UE, que es el principal socio comercial de España. Además, los motivos principales tras la revisión a la baja son que la confianza de los consumidores “sigue siendo baja” y que los indicadores de confianza de las empresas desde la primavera, así como las encuestas de actividad empresarial, muestran una evolución más débil en todos los sectores desde julio.

En cuanto a la composición del crecimiento para el próximo año, la OCDE coincide con el Banco de España y considera que el “motor clave” será la demanda interna ante una aportación menor de la demanda exterior que en años anteriores. Por otra parte, prevé una inflación del 3,7% en 2024, muy similar a la de 2023, y un descenso hasta el 2,3% en 2025. En esta línea, el organismo espera que la inflación repunte en el primer semestre de 2024 porque da por hecho que se retirarán las medidas para frenar la inflación de los precios de la energía.

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Por otra parte, la OCDE reconoce que “el mercado laboral es sólido” con un crecimiento anual del empleo del 2,6% en octubre por la incorporación de inmigrantes a la población activa y detecta un avance de los salarios nominales del 4,3% en el año hasta el tercer trimestre.

La OCDE pide una “consolidación fiscal más fuerte”

Las previsiones de la OCDE apuntan a un déficit del 3,6% para 2024, una cifra mejor de la que espera el Gobierno (3,9%), pero señalan que se rebasará ligeramente el límite del 3% en 2024 (3,2%) y en 2025 (3,1%), en línea con la Comisión Europea. Peores datos se calculan para la deuda pública, la cual ganaría peso sobre el PIB el próximo año, según el organismo, hasta situarse en el 110,1%. Según los últimos datos del Banco de España, la deuda pública se situó en el 109,9% del PIB en septiembre de este año.

Debido a esto, la OCDE detecta que España necesita “una consolidación fiscal más fuerte y sostenida” para mantener la deuda pública en una senda descendente, como pedirán las nuevas reglas fiscales. También recomienda este plan, al igual que ha hecho la AIReF en reiteradas ocasiones, para crear margen fiscal para el gasto relacionado con el envejecimiento y el impulso a un crecimiento económico más sostenible (en clara alusión a las reformas en transformación digital y verde).

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