Nicole Kidman ha decidido pasar esta temporada navideña lejos de Hollywood y cerca de sus raíces. La actriz se encuentra en Australia junto a sus hijas Sunday Rose, de 17 años, y Faith Margaret, de 14 años, para celebrar la Navidad.
El viaje marca un momento significativo para la intérprete, pues representa su primer festejo decembrino desde que se hizo pública su separación de Keith Urban.
De acuerdo con una fuente cercana a Kidman que habló en exclusiva con PEOPLE, la actriz está entusiasmada por reencontrarse con su país natal y vivir estas fechas en un entorno familiar.
“Nicole y las niñas están en Australia para Navidad. Esto es todo lo que ella quería después de un otoño tumultuoso. Solo quería celebrar la Navidad en casa. Está muy emocionada”, señaló la fuente.
Kidman fue vista en una reunión de Nochebuena acompañada de sus hijas, sonriente y luciendo su cabello naturalmente rizado, en una imagen que reflejó un ambiente relajado y cercano.
El regreso a Australia se produce meses después de que la actriz, ganadora del Óscar, presentara la solicitud de divorcio de Keith Urban el pasado 30 de septiembre, tras casi 20 años de matrimonio. En los documentos, la separación fue atribuida a “diferencias irreconciliables”.
Pese a los cambios recientes en su vida personal, el entorno de la estrella de Hollywood asegura que se encuentra en buen estado anímico. “Está muy bien. Ha sido súper positiva y está enfocada en las cosas por las que se siente agradecida. Y son muchas. Se siente muy bendecida”, indicó la misma fuente.
Además de Sunday y Faith, Nicole Kidman es madre de Connor, de 30 años, y Bella, de 32, fruto de su anterior matrimonio con Tom Cruise.
En noviembre, otra fuente explicó a PEOPLE que la transición familiar se ha manejado de forma cordial, especialmente en lo relacionado con las hijas adolescentes de la expareja, por lo que ambos padres continúan comprometidos con la crianza compartida.
“Las niñas viven con Nicole, pero pasan todo el tiempo que desean con Keith. No hay dram. El enfoque está en sus hijas. Los dos quieren crear un ambiente estable y de apoyo para ellas”, aseguró.
Los acuerdos legales alcanzados tras la presentación del divorcio refuerzan ese objetivo. Documentos judiciales obtenidos por PEOPLE revelan que Nicole Kidman y Keith Urban pactaron un plan de crianza que incluye, entre otros puntos, el compromiso de no hablar negativamente el uno del otro ni de sus respectivas familias.
El acuerdo también establece que ambos “alentarán a cada hijo a seguir amando al otro padre y a sentirse cómodo en ambas familias”, una cláusula diseñada para preservar la estabilidad emocional de las adolescentes.
Como parte del proceso, tanto Kidman como Urban debieron asistir a un seminario de crianza dentro de los 60 días posteriores a la presentación del divorcio.
En cuanto a la custodia, los documentos señalan que la actriz fue designada como la principal progenitora residencial, con un total de 306 días al año junto a Sunday y Faith. El músico, por su parte, pasará 59 días anuales con sus hijas, aunque se mantiene la flexibilidad para que las jóvenes compartan tiempo con ambos padres según sus deseos.