Otamendi debió haber sido expulsado por el codazo a Raphinha en Argentina-Brasil

El zaguero central le acertó un golpe en el rostro al delantero y el árbitro decidió no revisar la acción en el VAR

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Argentina y Brasil se enfrentan en un duelo de alto voltaje en San Juan por la fecha 14 de las Eliminatorias Sudamericanas. Los dos mejores seleccionados del continente chocan en un compromiso cargado de tensiones, luego de la suspensión del último partido en tierras brasileñas cuyo final se dirime en los tribunales de la FIFA, y de la final de la Copa América 2021, que coronó a los comandados por Lionel Scaloni en el Estadio Maracaná.

Semejantes antecedentes hizo que por momentos el juego sea friccionado en el Estadio Bicentenario y se vivieron algunos cruces violentos. El más polémico de esos ocurrió pasada la media hora del partido en una gran maniobra individual de Raphinha, quien por derecha escapó de la mara de Marcos Acuña, se metió en el área y se topó con Nicolás Otamendi. El futbolista de la Albiceleste le robó la pelota, le ganó lícitamente la posición y cuando buscaba el hueco para rechazar de zurda, le acertó un golpe al rostro al delantero brasileño.

El codazo del experimentado futbolista que ahora juega en el Benfica de Portugal dejó sangrando al punta del Leeds United y esto hizo estallar la bronca de los dirigidos por Tite, quienes reclamaban la expulsión. Por la violencia y la voluntariedad clara de Otamendi, éste merecía tarjeta roja.

Sin embargo, Andrés Cunha entendió que el contento se produjo por un forcejeo natural, según le explicó a los jugadores. Así lo habrá visto también el juez de línea Richard Trinidad, quien en un primer momento parecía haber advertido el golpe, pero luego optó por el silencio.

Lo más curioso ocurrió con la intervención del VAR, que luego de revisar la acción le indicó al árbitro Cunha que repasase la jugada en la pantalla del campo de juego, pero éste se negó a hacerlo. Según se pudo interpretar por las señas que realizó mientras se tomaba el intercomunicador, él vio claramente que el codazo no había sido voluntario.

Vale remarcar que el árbitro de juego es la máxima autoridad en el campo y tanto el VAR como los jueces de línea pueden avisarle de acciones que él no ve, pero siempre es él quien toma la decisión final, como en este caso. Así, Otamendi no solo no vio la roja, sino que además tampoco la amarilla, porque el uruguayo Cunha no cobró siquiera infracción.

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