La carrera de Gustavo Oberman tiene perlitas imperdibles para todos los gustos. Fue una de las máximas promesas del semillero de Argentinos Juniors, a tal punto de enviar al banco de suplentes nada más ni nada menos que a Lionel Messi en los primeros partidos del Mundial Sub 20 del 2005 que terminó consagrando al crack.
Después de pasar por diferentes tramos de su carrera, decidió dar uno de sus últimos pasos en el club de su ciudad y será parte de Argentino de Quilmes en la Primera División C durante la próxima temporada.
El Chachete jugó hasta fines del 2016 en el Pune City de India. Tras pasar siete meses sin competencia, a sus 32 años tomó la determinación de ayudar al Mate a pelear por el ascenso a la B Metropolitana. En su última experiencia se animó también a compartir los extraños sucesos que vivía por intermedio de su Facebook.
Salió de Argentinos Juniors y consiguió una pronta transferencia a River, aunque el rendimiento no fue el esperado. Pasó por el Castellón (España), Cluj (Rumania), Córdoba (España) y retornó al Bicho, donde fue clave para alcanzar el título en el Clausura 2010.
Tras ese éxito, jugó en Quilmes, Olimpo y comenzó su periplo final por San Marcos de Arica (Chile). "Todo lo que es en mi ciudad me genera cariño. Mi hija es socia del club y lo representa en patín artístico. Más allá de eso, se está armando un proyecto serio, con la idea de apuntar al ascenso", comentó en diálogo con el portal especializado Solo Ascenso.
El combinado del sur de la ciudad está en pleno proceso de armado del plantel, aunque ya sumó algunas caras nuevas como las de Franco Cristofanelli (Atlas) y Leandro Sosa (Dock Sud).
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