Sebastián Villalobos habló sobre temas de su vida personal en el pódcast Los hombres sí lloran, de Juan Pablo Raba, donde hizo una profunda confesión sobre sus relaciones sentimentales, los miedos que lo llevaron a terminar varias de ellas y el proceso personal que lo ayudó a sanar y reconstruir su vida emocional.
Durante la conversación, el creador de contenido recordó lo difícil que fue la ruptura con Camila Santamaría (su actual pareja y la madre de su hija), una relación que, aunque terminó por decisión suya, lo afectó más de lo que esperaba.
Ese episodio lo llevó a mirar hacia atrás y a identificar un patrón que se repetía en su vida amorosa: él solía ser quien daba por terminadas las relaciones.
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“A mí me afectó mucho la terminada con Cami. A pesar de que yo fui el que termine la relación, me afectó, entonces empecé como también a retroceder un poco a mis anteriores relaciones, que también yo las terminaba, y como a indagar en por qué, o sea, qué pasaba en este momento”, empezó diciendo el creador de contenido.
En ese ejercicio de introspección, Villalobos comenzó a preguntarse por las razones detrás de ese comportamiento y encontró una posible raíz en su historia familiar.
Según contó, empezó a cuestionarse si el abandono que sintió por parte de su padre en el pasado lo había llevado a desarrollar un miedo profundo a ser abandonado, al punto de preferir irse antes de que lo dejaran.
“Empecé yo a pensar como: ‘¿Será que algo de lo de mi papá tiene que ver? ¿Será que de pronto como que ese abandono que mi papá, pues, me dio, me hace como huirle al abandono y cuando las cosas se ponen mal en pareja, yo prefiero ser el que se va que esperar a que me abandonen a mí?’”, reflexionó Sebastián.
Sin embargo, el influencer también reveló que, a partir de esa situación y lo que tuvo que aprender con el paso del tiempo, su relación con su padre cambió de manera significativa y eso le ayudó en su vida.
Hoy en día, asegura que recibe mensajes diarios llenos de afecto, una situación que describe como sanadora y que le permitió cerrar heridas emocionales que arrastraba desde hace años.
“Hoy por hoy, mi papá me escribe diario, está todos los días: ‘Hola, hijo. Te amo. Feliz día. Bendiciones. Que Dios te bendiga. ¿Cuándo vienes? Te extrañamos’. No sé qué... Y la verdad que sí fue algo como bien bonito, ¿sabes? Porque además siento que una parte de mí sanó“, confesó Sebastián.
Pero el proceso interno tuvo consecuencias directas en su vida amorosa, ya que más de un año después de la ruptura fue que Sebastián volvió a hablar con Camila y, con una nueva conciencia emocional, ambos decidieron darse una segunda oportunidad.
De todas formas no fue tan fácil, pues esta vez tomaron una decisión distinta: iniciar terapia de pareja y permitir que el proceso terapéutico definiera si realmente debían estar juntos, un camino que dio como resultado la familia que hoy conforman y el nacimiento de su hija.
En el pódcast, Sebastián también compartió uno de los aprendizajes más importantes que le dejó la terapia: enfrentar sus propios “demonios” y reconoció que durante mucho tiempo se acostumbró a glorificar únicamente lo positivo de su vida —los logros, el éxito y lo bonito— mientras escondía sus miedos, fracasos y emociones difíciles.
Esa evasión, explicó, lo llevaba a huir cuando aparecían los conflictos, tanto propios como ajenos, entonces la confrontación de su terapeuta fue lo que lo ayudó a ponerle palabras a algo que ya intuía, pero no había querido enfrentar.
A partir de ahí, decidió trabajar en darle espacio y valor a sus aspectos más vulnerables, entendiendo que no se puede vivir mostrando solo las victorias y ocultando todo lo demás.