La relación entre varios de los presuntos implicados en el atentado ha llamado la atención de los investigadores, quienes consideran que las capturas y la identificación de los responsables de la logística sicarial en el ataque contra Miguel Uribe Turbay son fundamentales para esclarecer quiénes ordenaron el crimen.
Según informó Noticias Caracol, las autoridades han logrado avances en la reconstrucción de los hechos y en la identificación de los actores clave detrás del atentado que mantiene al senador y precandidato presidencial en estado crítico.
La Fiscalía General de la Nación y la Policía han logrado avances significativos en la investigación, que podrían ser determinantes para descubrir quiénes están detrás del crimen. En el transcurso de una semana, fueron capturadas dos personas señaladas como piezas clave en la logística del ataque, que mantiene al político en estado crítico.
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Se trata de Carlos Eduardo Mora González y Catherine Andrea Martínez Martínez, esta última conocida bajo el alias de Gabriela. Ambos detenidos habrían tenido una participación directa en la organización del atentado perpetrado en el barrio Modelia, en el occidente de Bogotá.
Carlos Eduardo Mora González fue capturado en Bogotá y enfrenta cargos por tentativa de homicidio agravado, porte ilegal de armas de fuego y uso de menores en la comisión de delitos. De acuerdo con la fiscal general Luz Adriana Camargo, Mora habría sido el encargado del reconocimiento previo del lugar del atentado. Además, el día del ataque, se encontraba a bordo del vehículo Spark gris desde el cual, presuntamente, se ultimaron los detalles antes de que el sicario descendiera con el arma y disparara contra Uribe Turbay.
Por su parte, alias Gabriela fue detenida en Florencia, Caquetá, tras haberse dado a la fuga luego del atentado. La Fiscalía indicó que la mujer, oriunda de Barranquilla, pero residente en Bogotá, habría participado en la planeación del crimen.
Tras el ataque, habría intentado evadir a las autoridades modificando su apariencia y desplazándose hacia el sur del país, pero se logró su captura y se le imputaron delitos similares a los de Mora, entre ellos tentativa de homicidio agravado y uso de menores para delinquir.
Sin embargo, en las últimas horas está siendo noticia que la investigación ha revelado la identidad de otros dos hombres presuntamente involucrados en la operación criminal conocidos como El Costeño y El Negro (también llamado Byron), ambos estarían vinculados directamente con la ejecución logística del atentado.
El Costeño, según la Unidad Investigativa de Noticias Caracol, fue captado por cámaras descendiendo del mismo Spark gris que transportaba al sicario. Su identidad habría quedado expuesta al girar un pago vía Nequi al motociclista que transportó al atacante hasta el lugar de los hechos.
Mientras tanto, El Negro, o Byron, tiene antecedentes judiciales por hurto, porte ilegal de armas y extorsión, y es un hombre oriundo de Florencia, el mismo municipio donde fue capturada alias Gabriela, y mantiene vínculos con Mora y Martínez, con quienes figura en un proceso judicial por tráfico de armas.
La conexión entre estos cuatro presuntos implicados ha captado la atención de los investigadores, quienes consideran que su captura y la reconstrucción de sus movimientos serán fundamentales para identificar a los autores intelectuales del atentado.
La Fiscalía no descarta que haya una estructura criminal detrás del ataque, posiblemente con financiación y logística más amplias que las inicialmente identificadas.
En cuanto a la posibilidad de fuga de los implicados, las autoridades barajan la hipótesis de que alias Gabriela habría intentado cruzar la frontera hacia Ecuador. No obstante, su captura frustró ese posible plan. Desde el vecino país, la portavoz del gobierno ecuatoriano, Carolina Jaramillo, aseguró que hasta el momento no existen reportes oficiales ni solicitudes de colaboración por parte de Colombia respecto a los responsables del atentado.
Entretanto, el estado de salud de Miguel Uribe Turbay sigue siendo extremadamente delicado. A primera hora del 17 de junio, su esposa María Claudia Tarazona compartió una nueva imagen de una videollamada en tiempo pasado con el senador y la acompañó con un mensaje en el que reafirmó su fe y amor en medio de la adversidad, asegurando que sigue con vida y luchando.
“De la mano de Dios, con la ayuda de Dios, con el amor que te mantiene vivo, va a volver a suceder. Te amo, amor de mi vida”, escribió.