Uno de los líderes políticos de Hamas, Khalil al-Hayya, confirmó la muerte del máximo jefe del grupo terrorista Yahya Sinwar en Gaza.
En una declaración en video, dijo que la muerte de Sinwar sólo servirá para fortalecer a la milicia respaldada por Irán y prometió que “los ocupantes” pronto se arrepentirán de haberlo matado, en referencia a las tropas israelíes que llevaron adelante el operativo en el sur de la Franja a última hora del miércoles.
Además advirtió que los 101 rehenes que aún mantiene el grupo terrorista en Gaza no serán liberados si no cesa la guerra y las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) no se retiran del enclave palestino: “No quedarán libres a menos que cese la agresión contra nuestro pueblo, se produzca una retirada completa, y nuestros heroicos prisioneros salgan de las cárceles de la ocupación”, declaró.
“Yahya Sinwar y todos los líderes y símbolos del movimiento que lo precedieron en el camino de la dignidad y el martirio, y el proyecto de liberación y retorno, sólo construirán nuestro movimiento y darán fuerza a la resistencia”, dijo el funcionario que reside en Qatar.
El ala militar del movimiento que perpetró la masacre del 7 de octubre en territorio israelí, en la que fueron asesinados más de mil personas y raptadas otras 250 ha prometido que luchará hasta el final de sus vidas por “la liberación de Palestina”.
Al-Hayya, quien fue el enviado de Sinwar para encabezar la delegación del grupo durante varias rondas de negociaciones de alto el fuego mediadas por Estados Unidos, Qatar y Egipto.
En una declaración, Hamas elogió a Sinwar como un héroe que “ascendió como un mártir heroico, avanzando y no retrocediendo, blandiendo su arma, atacando y confrontando al ejército de ocupación al frente de las filas”.
La declaración parecía referirse a un vídeo que circuló el ejército israelí sobre los aparentes últimos momentos de Sinwar, en el que un hombre se sienta en una silla en un edificio gravemente dañado, gravemente herido y cubierto de polvo. En el vídeo, el hombre levanta la mano y lanza un palo a un avión no tripulado israelí que se acerca.
La muerte de Sinwar, ocurrida el miércoles en lo que parecía un encuentro casual en primera línea con tropas israelíes, podría cambiar la dinámica de la guerra en Gaza, mientras Israel continúa su ofensiva contra Hezbollah con tropas terrestres en el sur del Líbano y ataques aéreos en otras zonas del país. Hezbollah ha disparado cohetes contra Israel casi todos los días desde que comenzó la guerra entre Israel y Hamas.
Tanto Hamas como Hezbollah cuentan con el respaldo de Irán, que saludó a Sinwar como un mártir que puede inspirar a otros a desafiar a Israel.
Este país se ha comprometido a destruir políticamente a Hamas en Gaza, y matar a Sinwar era una prioridad militar máxima. Las fotografías que aparentemente fueron tomadas por tropas israelíes en el lugar de los hechos mostraban el cuerpo de un hombre que parecía ser él, semienterrado entre los escombros y con una herida abierta en la cabeza.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo en un discurso anunciando el asesinato el jueves por la noche que “nuestra guerra aún no ha terminado”.
Pero muchos, desde los gobiernos aliados de Israel hasta los exhaustos residentes de Gaza, expresaron la esperanza de que la muerte de Sinwar allanaría el camino para el fin de la guerra.
En Israel, las familias de los rehenes que siguen retenidos en Gaza exigieron al gobierno israelí que utilice el asesinato de Sinwar como una forma de reiniciar las negociaciones para traer de regreso a casa a sus seres queridos. Hay alrededor de 100 rehenes en Gaza, al menos 30 de los cuales, según Israel, están muertos.
“Estamos en un punto de inflexión en el que se han logrado todos los objetivos fijados para la guerra con Gaza, salvo la liberación de los rehenes”, dijo Ronen Neutra, padre del rehén israelí-estadounidense Omer Neutra, en una declaración en video: “Sinwar, a quien se describió como un gran obstáculo para un acuerdo, ya no está vivo”.
Netanyahu tenía previsto convocar una reunión especial el viernes para tratar las negociaciones sobre los rehenes, según dijo un funcionario israelí con conocimiento de las negociaciones. El funcionario habló bajo condición de anonimato para poder hablar de información confidencial.
La misión de Irán ante las Naciones Unidas emitió una declaración en honor a Sinwar, enfatizando que murió en el campo de batalla y no escondido, a diferencia de su antiguo enemigo, el líder iraquí Saddam Hussein, quien fue ahorcado en 2006.
Con información de agencias