Israel aspira a ser líder mundial en la lucha contra el cambio climático

El país está ávido de compartir las tecnologías que tiene para proteger el ambiente en la conferencia climática que está teniendo lugar en Glasgow, Escocia

Compartir
Compartir articulo
La planta de desalinación de agua Sorek en Rishon Letzion, Israel (Foto: AP)
La planta de desalinación de agua Sorek en Rishon Letzion, Israel (Foto: AP)

Israel está tratando de ser líder en la lucha mundial contra el cambio climático con una estrategia que servirá al mismo tiempo para promover la paz en el Medio Oriente.

A pesar de su pequeño tamaño y la imposibilidad alcanzar la meta de cero emisiones para el 2050, Israel tiene el potencial de estar a la vanguardia en ese campo, afirmó la nueva ministra del ambiente israelí, Tamar Zandberg.

En entrevista con la agencia AP, Zandberg presentó la estrategia israelí de cara a conferencia climática que está teniendo lugar en Glasgow, Escocia.

Zandberg afirmó que Israel está ávido de compartir las tecnologías que tiene para proteger el ambiente. El país es considerado líder mundial en áreas como la energía solar, el cultivo de proteínas alternativas, la tecnología agrícola y de desalinización.

“Estos son campos en los que Israel ya está a la vanguardia en cuanto a la innovación, y esperamos que como pequeño país podamos ayudar a los países más grandes, para que todos juntos podamos adaptarnos a la nueva realidad climática”, expresó la ministra.

Potencias económicas como China y la India se han convertido en importantes mercados para las tecnologías ambientales israelíes. Zandberg indicó que se ha reunido con su homólogo de los Emiratos Árabes Unidos, país que estableció relaciones diplomáticas con Israel el año pasado, y que los dos países han designado comisiones para cooperar en temas como agricultura y recursos de irrigación en esta árida región.

Ministra del ambiente israelí, Tamar Zandberg (Foto: Reuters)
Ministra del ambiente israelí, Tamar Zandberg (Foto: Reuters)

Israel y Jordania firmaron la semana pasada un acuerdo para compartir recursos de agua, y Zandberg aseguró que ambos países están realizando “extensas conversaciones” en torno a diversos temas ambientales.

Nuestros vecinos comparten la región con nosotros, comparten el clima con nosotros, así que es sólo lógico que enfrentemos el problema juntos. Ello no sólo ayudará en la lucha contra el cambio climático sino también a lograr la paz en el Medio Oriente”, expresó Zanberg.

Zandberg asumió el cargo al ascender un nuevo gobierno en Israel, formado por una heterogénea coalición que abarca todo el espectro político e incluye partidarios de estrategias diametralmente opuestas hacia el conflicto con los palestinos.

Sin embargo, el ministerio de Zandberg enfrenta duros desafíos.

Israel ha reconocido que no logrará la meta de reducir sus emisiones a cero para el año 2050, aunque asegura que podrá reducirlas en un 85%. Activistas atribuyen el problema a la falta de voluntad política por parte de gobiernos previos y a la dependencia del país en recursos recién descubiertos de gas natural.

El presidente de la COP 26 (Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático 2021), Alok Sharma (Foto: EFE/ Fernando Alvarado)
El presidente de la COP 26 (Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático 2021), Alok Sharma (Foto: EFE/ Fernando Alvarado)

Zandberg mencionó también que la alta tasa de crecimiento demográfico en el país es un obstáculo. Y si bien Israel no cumplirá con la meta de cero emisiones, la ministra indicó que desea ayudar al resto del mundo a alcanzar ese objetivo, mediante la exportación de tecnologías y la aprobación de leyes a nivel nacional.

“Ese es nuestro objetivo, cerrar esa brecha”, comentó Zanberg. “Por primera vez, el parlamento israelí está debatiendo leyes ambientales. Estamos trabajando en planes para implementar todo eso, para tomar el ideal de una economía de emisiones reducidas y hacerlo realidad en los sectores de energía, transporte, eliminación de desechos, agricultura. Así que lo hemos tomado en serio”.

Hay otros desafíos. El Mar Muerto, que en realidad es un lago salado ubicado en el punto de menor altitud del planeta, se está secando como resultado del desvío de las aguas para beber y para irrigación agrícola, y de los daños causados por compañías mineras. Un reciente acuerdo con los Emiratos Árabes Unidos para crear un oleoducto ha despertado temores de que un derrame petrolero destruya los arrecifes de coral del Mar Rojo, apreciados por su singular capacidad de resistir el calentamiento de los mares. Diversos cuerpos de agua en Israel y la Margen Occidental están amenazados por la contaminación y el manejo de desechos.

Zandberg afirmó que su ministerio está involucrado en negociaciones para asegurarse de que las fábricas en el Mar Muerto, entre las más contaminantes de todo Israel, se comprometan a proteger el medio ambiente cuando se renueven sus licencias en los próximos años. El oleoducto con los Emiratos está ahora siendo revisado por el gobierno, dijo, y “presentaremos nuestras inquietudes en las negociaciones”. Zandberg además ha estado elaborando planes para aplicar un nuevo impuesto al uso de plásticos.

(Con información de AP)

Seguir leyendo: