Guerrero: el nepotismo de Salgado Macedonio mantiene en vilo la designación del candidato de Morena

Durante la reunión de la Comisión Nacional de Elecciones del partido, Salgado Macedonio insistió en imponer a su hija Evelyn como su sustituta en la contienda por la gubernatura

Compartir
Compartir articulo
Quien es Evelyn Salgado, posible sustituta de su padre en la gubernatura por Guerrero (Foto: Facebook /@ evelyn.salgado.54966)

La designación de un nuevo candidato de Morena para contender por la gubernatura de Guerrero, sigue en suspenso. Y es que los jaloneos e intento de imposiciones durante la reunión de la Comisión Nacional de Elecciones del partido realizado la tarde-noche del miércoles 28 de abril, hicieron imposible que pudiera definirse al sustituto o sustituta morenista.

De acuerdo con el periodista Salvador García Soto en su columna de El Universal, Félix Salgado Macedonio intentó legitimar el nepotismo, una práctica que rechaza de manera tajante el presidente Andrés Manuel López Obrador.

El columnista aseguró que mientras Salgado Macedonio insistía en que su hija, Evelyn Salgado Pineda, fuera nombrada la candidata, Mario Delgado -presidente de Morena- intentaba evitarlo proponiendo a la exsecretaria de Desarrollo Social guerrerense, Beatriz Mojica Morga.

“El jaloneo interno se puso tan intenso ante la presión de Félix por postular a su hija, que Mario Delgado y la Comisión de Elecciones de Morena decidieron posponer la decisión en Guerrero, prevista para anunciarse ayer a las 8 de la noche, para dentro de 48 horas”.

(Foto: especial)

Salvador García Soto destacó que desde un inicio, el presidente de los morenistas propuso como nueva candidata a Beatriz Mojica, aspirante que compitió con Salgado, exdiputada federal y exsecretaria de Desarrollo Social de Guerrero.

“‘Una candidata como ella sería la opción para el partido por experiencia y por temas de género’, argumentaba Delgado, contra la insistencia, casi necedad de Salgado, de que fuera su hija y nadie más quien lo sustituyera, con lo cual él, además de ser el coordinador de campaña, sería también el gobernador de facto en caso de que Evelyn Salgado ganara la elección de junio próximo”, resaltó el periodista.

Pero esta división de opiniones también se ha trasladado al gobierno de la 4T. “Había un grupo que decía que ‘Félix tiene derecho a decidir y si quiere que sea su hija, debe serlo’, y otros secretarios federales que cuestionaban lo que consideraban un acto de nepotismo que resultaría incongruente para el partido y para el gobierno.Mientras tanto otros secretarios del gabinete lopezobradorista se oponían a la candidatura de Beatriz Mojica, bajo el argumento de que “es muy perredista”, por haber sido, como la mayoría de los integrantes actuales de Morena, militante y secretaria General del PRD, donde además fue parte del grupo de ‘Los Chuchos’, enemigos acérrimos de López Obrador”, puntualizó García Soto.

El columnista destaca que el problema para Mario Delgado es que, aceptar la postulación de Evelyn Salgado, abriría un frente de críticas y descalificaciones contra la 4T y el presidente López Obrador, que en varias ocasiones en lo que va de su gobierno, ha reiterado que el “nepotismo, amiguismo, compadrazgo e influyentismo, son de las peores lacras políticas del antiguo régimen” y que ya no existen en su gobierno.

¿Cómo entonces explicarían López Obrador y su partido postular a la hija de un candidato como sustituta de su propio padre? Ese dilema ético y moral es lo que impidió anoche que Félix Salgado concretara la intención de hacer candidata a Evelyn Salgado, como había afirmado la noche del martes cuando, desde Chilpancingo, amenazaba con que ‘ya no vamos a ser uno, vamos a ser dos’ en la boleta electoral y decía que ‘a todos los que festejaban y andaban en la borrachera porque nos anularon el registro, les va a dar una cruda, cuando se enteren del plan. Porque hay toro y va a haber toro’. El capricho nepotista de Salgado lo complicó todo. En varias ocasiones, según fuentes internas de Morena, Mario Delgado tuvo que salir de la reunión en la que participaban los dos candidatos y hacer llamadas a Palacio Nacional para tratar de saber si el presidente aceptaba o no la postulación de Evelyn Salgado”, reveló el periodista.

(Foto: Cortesía Morena)

Ante esta situación, lo único que acordaron en el CEN morenista, fue que Félix será el presidente estatal de su partido en Guerrero y desde ahí coordinará la campaña de quien sea su sustituto o sustituta en la candidatura.

En contraste, la Comisión Nacional de Elecciones del partido resolvió que Alfredo Ramírez Bedolla, hasta ahora líder del Congreso local de Michoacán, será el nuevo candidato de Morena al gobierno de ese estado, impulsado por Raúl Morón, quien también se convertirá en dirigente estatal y coordinador de la campaña morenista.

Y es que a diferencia de Félix Salgado, Morón adoptó una posición mucho más congruente y flexible y desde ayer por la mañana, en conferencia de prensa, les respondió a los reporteros que él no pensaba postular a su hijo Raúl Morón como candidato.

El columnista aseguró que, según fuentes morenistas, “fue el propio López Obrador quien definió que, ante la decisión mayoritaria de los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, de cancelarles definitivamente el registro, fueran los mismos Félix Salgado y Raúl Morón quienes propusieran quién querían que fuera su sustituto o sustituta en la candidatura. Y Félix, que tiene más colmillos que cuernos y que además ha sido defendido a capa y espada por el propio presidente, se aprovechó de esa instrucción de Palacio Nacional para tratar de imponer forzosamente a su hija, algo que contradice totalmente el discurso lopezobradorista en contra del nepotismo”, enfatizó García Soto.

“Veremos cómo resuelven en Morena y en la 4T este ‘galimatías’ en que se encuentran, donde por un lado está un toro que, aun con la estocada que le puso el Tribunal, aún resopla y quiere venganza imponiendo su apellido y su descendencia en el gobierno de Guerrero, y por otro lado está el discurso de López Obrador que condena el nepotismo y afirma que, como muchas otras ‘lacras políticas del pasado’, ya desapareció de su gobierno. ¿Será que los compromisos para que Félix Salgado controle el gobierno guerrerense, donde operan varios grupos del narcotráfico, son de tal tamaño que, ‘haiga sido como haiga sido’, impondrán el apellido Salgado en el Palacio de Gobierno de Chilpancingo? No sería la primera vez que el presidente se tenga que morder la lengua por incongruencias entre sus dichos y sus hechos”, finalizó.

SEGUIR LEYENDO: